Los problemas en la cama se asocian con mayor frecuencia no con las características fisiológicas de la pareja, sino con la preparación psicológica de ambos. Los principales enemigos del buen sexo son la timidez y el miedo al ridículo. La rigidez se convierte en un obstáculo para el placer real.
Instrucciones
Paso 1
Hablar de temas "prohibidos" se considera falta de tacto e indecente. De ahí surge la vergüenza en la cama. E incluso si el compañero hace todo completamente mal, será vergonzoso enviarlo en la dirección correcta. Tal rigidez psicológica conduce a la imitación del orgasmo, a la falta de satisfacción en la vida sexual. La tarea de los socios es aprender a divertirse en la cama. Esto se puede lograr si encuentran contacto psicológico entre sí. En un ambiente tranquilo y confidencial, discuta pensamientos y deseos, hable con su pareja sobre lo que quiere en el sexo, cómo quiere realizarlo y qué se necesita para ello.
Paso 2
La rigidez en el sexo es un problema bastante común para los niños y niñas "principiantes", sin experiencia. Si tu compañero es uno de esos, ayúdalo, trata de guiarlo, enseñarle, sugerirle gentilmente. Si eres tú quien no tiene experiencia en el amor, participa en la autoeducación. Se han escrito muchos manuales y libros, ficción. Naturalmente, la rigidez se supera gradualmente en el proceso de "entrenamiento práctico" frecuente. Una interesante opción "inmodesta" es ver juntos una película porno.
Paso 3
Ofrezca a su pareja tímida un papel activo. Si siempre ha sido presentador en la cama, cambie de rol al menos una vez. Si fue usted quien siempre se apoderó de la rigidez al ver a un compañero desnudo, intente asumir su papel dominante, deje de ser guiado. Ayuda a superar la opresión y la opresión en el sexo. Dígale a su amado que está listo para cumplir sus deseos. Si algunos de ellos te parecen desagradables o inaceptables, no temas hablar directamente sobre ellos. Así lograrás la armonía en el sexo.
Paso 4
Una de las razones por las que te avergüenzas en la cama es preocuparte por las imperfecciones de tu cuerpo. Deja de preocuparte. Tu pareja te ve de lleno. Recuerda cómo te mira, cuánto te quiere, lo querido que eres para él. Obviamente, él simplemente no se da cuenta de tus defectos, por lo tanto, no hay razón para que tengas complejos al respecto. De lo contrario, si no puede superar su timidez natural sobre el exceso de peso, los defectos corporales, etc., entonces es hora de cambiar. Tranquilícese, haga dieta, haga ejercicio, consulte a un médico. Lo más probable es que la causa de los complejos se pueda corregir de una forma u otra, y esto le permitirá amarse y aceptarse a sí mismo.