El carbón activado está en el botiquín de casi todas las familias, porque es él quien ayuda tanto a adultos como a niños en casos de intoxicación y en muchas enfermedades infecciosas del tracto gastrointestinal. A pesar de que el carbón activado es un medicamento seguro, antes de dárselo a un niño, consulte a un pediatra o llame a un servicio de ambulancia para aclarar la dosis.
Es necesario
- - Carbón activado;
- - agua hervida.
Instrucciones
Paso 1
El medicamento en tabletas o en forma de suspensión acuosa se toma por vía oral. La dosis de carbón activado depende del peso y la edad del niño. Para preparar la suspensión, disuelva la cantidad requerida de tabletas de carbón en medio vaso de agua. Para los niños, el carbón activado se prescribe a razón de 0.05 g por kilogramo de peso corporal, tomado 3 veces al día. La dosis única máxima es de hasta 0,2 mg por cada kilogramo de peso corporal del niño. El curso del tratamiento para enfermedades agudas es de 3 a 5 días, hasta 14 días, para alergias y enfermedades crónicas. Por recomendación del médico tratante, se puede realizar un segundo curso en dos semanas.
Paso 2
En casos de intoxicación aguda, administre al niño un lavado gástrico con una suspensión acuosa de carbón activado, luego administre 20-30 g de carbón en el interior. Con flatulencias y trastornos digestivos, administre carbón 3-4 veces al día durante 1-2 g. El curso del tratamiento en este caso es de 3 a 7 días.
Paso 3
Recuerde que las pastillas vienen en diferentes pesos. Para los niños muy pequeños, puede comprar carbón activado en forma de gránulos, pasta o polvo; este medicamento se disuelve mejor en agua.
Paso 4
Tenga en cuenta que deben transcurrir al menos dos horas entre la ingesta de carbón activado y la ingesta de alimentos u otros medicamentos. De lo contrario, el carbón activado, al interactuar con los medicamentos, reducirá su absorción y la efectividad del tratamiento.
Paso 5
Si no nota que su hijo se siente mejor después de tomar carbón activado, llame a una ambulancia.