Es difícil lograr la obediencia de un niño, pero nada es imposible. Para superar este obstáculo, primero debe comprender la causa del mal comportamiento.
Instrucciones
Paso 1
Trate de encontrar la razón de la desobediencia del niño. Enfrentar el mal comportamiento a menudo es difícil. En la mayoría de los casos, la desobediencia del niño indica que el comportamiento de los propios padres está más allá de lo permisible. Los padres deben coordinar sus acciones al criar a un bebé. A menudo sucede que, por ejemplo, el padre permite que su hijo haga algo, y la madre se opone y, al ver lo que hace el bebé, le prohíbe hacerlo. La inconsistencia conduce a la contradicción. El niño está perdido y no sabe a quién escuchar. Por eso sigue haciendo lo que quiere, independientemente de las prohibiciones. En ningún caso debería permitirse esto.
Paso 2
No le prohíba a su bebé que haga algo que no haya hecho antes. Sucede que mi madre dice, por ejemplo, que no puedes subirte a la estantería. El niño ni siquiera pensó en esto, pero como su atención se centró en esto, funcionará una especie de reflejo. De una forma u otra, el niño querrá intentar trepar al estante prohibido.
Paso 3
Con el tiempo, el niño comienza a dejar de temer la amenaza del castigo. Esto se debe al hecho de que los padres a menudo intimidan al bebé. Pero cuando es culpable, el castigo no se lleva a cabo, sino que sigue siendo solo una amenaza. Sintiendo su impunidad, el niño interpreta este gesto de "misericordia" a su manera y sigue haciendo lo que le place.
Paso 4
Aprenda a controlar sus emociones. Si ya ha prometido que castigará, debe poner fin al asunto. Entonces el niño tendrá un sentido de responsabilidad por lo que ha hecho. Con el tiempo, el bebé determinará los límites de lo que está permitido para él y comenzará a obedecerle.