A veces, los niños son muy lentos. Tiene prisa y su hijo se congela en sus pensamientos, apenas se viste o busca entre sus cosas, tratando de encontrar algo. Usted hace comentarios, se molesta, pero cuanto más acalorada es la situación, más lento se mueve el niño por el apartamento.
Puede haber varias razones para la lentitud de un niño:
1. Ésta es una característica del temperamento del niño.
2. Los niños de entre 11 y 12 años no tienen una idea clara de la hora, por lo que no comprenden lo que significa llegar tarde y puntual.
3. Así responden los niños a un estilo de crianza autoritario.
4. De esta forma, algunos niños se adaptan a una situación que les causa malestar. Por ejemplo, cuando, después de separarse de sus padres, un niño necesita acudir a un maestro o maestro no querido.
¿Qué tengo que hacer?
- Analice lo que está sucediendo y comprenda cuál es la razón de la lentitud de su hijo, entonces le será más fácil encontrar una solución al problema. Trate de no apresurarse ni maldecir.
- La prisa es especialmente indeseable por la mañana. Levantate temprano. Deje que los preparativos de la mañana transcurran con calma. La clave del éxito es su buen humor, entonces los niños se volverán más obedientes. Cuéntanos algo gracioso.
- Anima a tu bebé. Se sabe que los niños necesitan el amor de los padres cuando menos lo merecen.
- Si a menudo parece el comandante de una unidad militar, dando órdenes y exigiendo su implementación inmediata, entonces piense: ¿qué le está enseñando a su hijo en esos momentos? ¿Obediencia incondicional? ¿Crees que le será útil en el futuro?
- No debe deshacerse y ordenar al niño. Permítale enfrentar las consecuencias de su lentitud. Llegará tarde a las clases de la escuela; déjele que reciba un comentario del maestro. Si no toma el autobús, se quedará sin un viaje interesante.
- Cuando el propio niño se dé cuenta de que llega tarde, no se apresure a ayudarlo. Simpatizar: "Sí, es una lástima, claro, pero también tengo mucho que hacer".
- No seas aburrido. Trate de abstenerse de sermonear. Mejor configúrelo positivamente. Di: "Te amo, hasta la noche". Le deseo un buen dia.
Si nota cambios positivos en el comportamiento, asegúrese de informarle a su hijo: “¡Esta mañana se preparó para la escuela tan rápido! Estoy muy contento "," ¿Ya estás haciendo tu tarea? Bien hecho". Esto inspirará al niño y fortalecerá el deseo de actuar con el mismo espíritu.