Cómo Reconocer El Autismo En Un Niño

Cómo Reconocer El Autismo En Un Niño
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Video: Cómo Reconocer El Autismo En Un Niño

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Video: Tutorial de los Primeros Signos de los Trastornos del Espectro Autista I Kennedy Krieger Institute 2024, Mayo
Anonim

Una condición en la que una persona se encuentra en un grado extremo de autoaislamiento se llama autismo. ¿Cómo reconocer los primeros signos de esta enfermedad en un niño para contactar con especialistas y ayudar al niño a sentir la alegría de comunicarse con el mundo que lo rodea?

Cómo reconocer el autismo en un niño
Cómo reconocer el autismo en un niño

Desde los primeros días de vida, los niños necesitan contacto táctil e intentan persistentemente llamar la atención sobre sí mismos. Sin embargo, un niño con autismo, por otro lado, se siente más cómodo en una cuna. Al encontrarse en los brazos de un adulto, intenta escapar, evitando el contacto corporal de todas las formas posibles.

El bebé no reacciona a las palabras cariñosas de los padres e incluso a los sonidos fuertes, un inesperado destello de luz brillante. Los juguetes suspendidos sobre la cabeza de la cuna no ocupan la atención del niño, permanecen invisibles para él. Parece que un pequeño pensador se ha instalado en tu casa, completamente inmerso en pensar en un determinado problema universal.

El niño está demasiado tranquilo, inactivo. No conoce la curiosidad natural de los niños. No es un investigador ni siquiera un observador de la vida a su alrededor. El niño no tiene prisa por declarar su problema con un grito fuerte y exigente, como suelen hacer los niños de su edad. Por el contrario, el grito de las migajas es monótono, en una nota. Es capaz de emitir sonidos tan persistentes durante mucho tiempo, encontrándose placer en ellos por sí mismo.

A medida que crece, el bebé se retrasa cada vez más en el desarrollo de sus compañeros. Pronuncia las primeras palabras de forma completamente incoherente, sin intentar juntar frases y transmitir sus deseos a los adultos. Para él, el habla no es un medio de comunicación, sino simplemente un conjunto de sonidos. No puede nombrar una acción o un objeto con una palabra.

Con los juguetes, el bebé puede sentarse durante horas, colocándolos monótonamente en una fila o en un círculo, de acuerdo con un plan conocido. El juego se parece más a un ritual que al entretenimiento infantil habitual. El niño ignora todos los intentos de los padres de interrumpir esta actividad y aprender algo nuevo.

El niño casi siempre está deprimido y desconcertado por algún problema desconocido para los demás. No tiene arrebatos emocionales pronunciados. Es igualmente indiferente a los elogios y los castigos. Para un niño, no hay eventos que merezcan una reacción violenta o una atención especial.

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