Muchos hombres perciben el matrimonio de manera bastante negativa. La falta de libertad y las obligaciones asustan a los machos. Así que no es de extrañar que a veces incluso los mejores hombres consideren casarse.
Mi novia arruina mi vida, ¿por qué casarme así?
Una de las razones más comunes para mantener el estado de soltero son las afirmaciones infundadas de su novia. Si ella constantemente exige algo, emite un mar de negatividad, lo regaña por cualquier motivo, incluso el hombre más paciente y comprometido cambiará de opinión acerca de asociar su vida con una mujer así.
Los amigos solteros pueden convencer a un hombre de que no se case. Un carácter débil o la dependencia de la opinión de las personas pueden empujar a un hombre a tomar esta decisión.
Otra buena razón para no querer casarse es la juventud y, como resultado, la falta de voluntad para asumir responsabilidades. Además, la juventud en este caso es más bien un criterio subjetivo. A veces, a los treinta y cinco o cuarenta años, un hombre puede considerarse demasiado joven para casarse. Tales hombres quieren caminar y calmarse, pero el asunto generalmente se limita solo al primer punto. En el caso de hombres como este, su excusa "es demasiado pronto para casarme" se convierte en "es demasiado tarde para casarme".
La cuestión de las finanzas ocupa un lugar de honor en la lista de razones. La falta de una situación financiera estable puede llevar a promesas a largo plazo de casarse lo antes posible. Después de todo, el matrimonio implica un mayor aumento de la familia, y muchos hombres responsables simplemente no están preparados para tener hijos hasta que la situación económica se estabilice.
Si un hombre ha dicho en repetidas ocasiones que no se va a casar contigo, y es muy importante que te cases legalmente, no pierdas el tiempo, vete. Es poco probable que esta relación te lleve al altar.
Los hombres y sus miedos
Por cierto, la cuestión de los niños también es muy importante. Muchos hombres simplemente no están preparados para tal responsabilidad. Además, ni siquiera se trata de limitar su libertad personal. Muchos hombres dudan de que puedan ser buenos padres. Si un hombre expresa este miedo, debe ser persuadido. Por lo general, es por dudar de los hombres que se hacen buenos padres.
La renuencia a convertirse en monógamos es una razón importante por la que los hombres podrían considerar casarse. Esta es una razón muy "honesta", porque muchos se casan y luego engañan a sus cónyuges, satisfaciendo sus deseos.
A veces, un hombre puede cambiar de opinión acerca de casarse, habiendo llegado a la conclusión de que junto a él no hay una mujer a la que pueda amar hasta el final de sus días. Y a veces, una pequeña cosa es suficiente para que un hombre comience a dudar de su novia o de sus sentimientos.