No es ningún secreto que los anillos de boda son un símbolo de que una persona ya tiene un alma gemela. Un anillo de compromiso se considera una confirmación del estado civil, pero hoy en día algunas mujeres prefieren cada vez más dejar un símbolo de amor conyugal y fidelidad en algún lugar de la casa en una caja.
La historia de la tradición de llevar un anillo de bodas
Al prepararse para una boda, la gente elige sus anillos de boda, pero pocos de ellos pensaron seriamente en el origen de esta tradición. Resulta que tiene raíces profundas en el pasado y está envuelto en todo tipo de leyendas románticas.
Según muchos historiadores, se originó en el Antiguo Egipto, donde las mujeres nobles usaban anillos de oro y plata, y otros menos ricos de arcilla y vidrio.
En Roma, los anillos de boda hechos en forma de llave eran populares; los hombres se los regalaban a sus esposas como señal de que una mujer compartiría todos los dolores y responsabilidades de su esposo. El mismo proceso de intercambio de anillos está impregnado del significado de que una parte de un ser querido siempre estará allí. Desafortunadamente, en la actualidad, los anillos de boda se han mantenido solo como una tradición que ha perdido su significado original. Algunos hombres y mujeres no quieren llevar este símbolo de fidelidad conyugal en su dedo en absoluto, considerando tal signo como un juego estúpido e inútil.
Los anillos de boda son inconvenientes
La negativa de los hombres a usar constantemente un anillo de bodas es comprensible para muchos, pero no está claro por qué el sexo justo se niega cada vez más a usarlo. Algunas mujeres creen que llevar el anillo constantemente es perjudicial para la salud, ya que hay puntos sensibles en la mano que están estrechamente asociados con determinados órganos.
El uso prolongado del anillo puede provocar problemas de salud.
Algunas mujeres no usan anillo de bodas para las entrevistas, por lo que quieren ocultar su edad y la presencia de niños. Otras mujeres creen que los anillos de boda obstaculizan un mayor avance profesional. Resulta que los empleadores pueden pensar que un hombre de familia no dará el 100% en el trabajo. Los representantes modernos del sexo justo quieren tener éxito en sus carreras porque, en su opinión, ser ama de casa no está de moda. Creen que las amas de casa son mujeres fracasadas, perezosas, estúpidas y poco interesantes. Por eso los valores familiares quedan relegados a un segundo plano, llega el momento de las personas egoístas que piensan solo en sí mismas.
Además, las mujeres tienen que realizar muchas tareas domésticas diferentes. Lavan, planchan, limpian, cocinan, lavan platos. Algunas niñas afirman que cualquier anillo en el dedo interfiere con el desempeño de ciertas tareas o puede dañarse.