No importa lo hermosa, inteligente y económica que sea una mujer, un hombre siempre necesitará un buen sexo de ella. Los juegos de cama, que difieren en variedad y ciertos hábitos, son la respuesta a la pregunta "¿cómo atar a un hombre?", Y al mismo tiempo mejoran significativamente la calidad de las relaciones.
1. El primer y principal hábito que ayudará a mantener a un hombre en su cama se considera hablar "sucio" y la capacidad de hablar en voz alta sobre los deseos sexuales. En primer lugar, de esta manera una mujer puede dejarle claro a un hombre lo que quiere y, en segundo lugar, la franqueza durante el sexo se vuelve hacia los representantes más moderados del sexo más fuerte.
2. A algunos hombres también les encanta ver a su pareja masturbarse. La autosatisfacción le permite no solo explorar completamente su cuerpo y mejorar su vida sexual: la masturbación frente a un ser querido también es un alto grado de confianza en él. Además, la mayoría de los hombres encuentran este proceso sorprendentemente hermoso, por lo que no debes negarles este placer.
3. El sexo oral también se puede atribuir a la categoría de la confianza; después de todo, si una mujer siente repugnancia por los genitales de su amado hombre, comienza a dudar de la calidad de su amor por él. Una mamada hábil, realizada con sinceridad y con mutuo placer, está garantizada para evitar que un hombre se vaya a otra cama en busca de las impresiones deseadas, al menos en los primeros años de una relación.
4. El buen sexo siempre significa orgasmo. Todo hombre se considera un buen amante. Si una mujer no tiene un orgasmo en la cama con un hombre, él comienza a complicarse con sus habilidades o culpa a su pareja por su frialdad, seguido de la búsqueda de una mujer más receptiva. ¿Qué hacer? No durará mucho en una simulación, por lo que los sexólogos recomiendan que las mujeres estudien sus zonas erógenas y se sientan libres de guiar a los hombres en la cama en la dirección correcta.
5. Las reglas del sexo implican necesariamente "alegría" en la vida íntima; por ejemplo, una mujer puede acariciar imperceptiblemente a un hombre en un lugar lleno de gente, entregarse a él en un ascensor u otro lugar inesperado, etc. En una palabra, cuanto más impredecible se comporte la pareja, más interesado estará un hombre en una relación con ella.