El nacimiento de un niño trae mucha alegría, pero no menos preocupaciones. Después de todo, cuidar a un bebé requiere mucha concentración, mucho tiempo y esfuerzo. Mamá recibe muchas recomendaciones en el hospital, muchas de familiares y amigos. Y los padres piensan en algunas preguntas directamente cuando se enfrentan a ellas, por ejemplo, con qué frecuencia bañar a un recién nacido.
Dónde bañar a tu recién nacido
La mejor opción, para la comodidad de los padres y la seguridad del bebé, sería utilizar una bañera especial para bebés.
En primer lugar, es el más higiénico, porque el baño público está lleno de gérmenes de miembros adultos de la familia, y el uso de productos químicos fuertes para la limpieza puede dañar al bebé.
En segundo lugar, es un consumo de agua más económico en comparación con un baño compartido.
En tercer lugar, es más conveniente. Esto se justifica por el hecho de que se puede subir el baño sustituyendo algo, o se puede bañar al bebé en otra habitación si la temperatura en el baño es baja para el bebé.
En cuarto lugar, no siempre hay condiciones en una vivienda, es decir simplemente no hay baño o se reemplaza por una ducha.
En un baño con agua, por recomendación de un pediatra, puede agregar una solución débil de permanganato de potasio, una decocción de hierbas medicinales como una cuerda o celidonia. Sin embargo, vale la pena recordar que cualquier hierba puede provocar una reacción alérgica y dicho baño no se puede repetir más de una vez a la semana. La temperatura del agua debe estar cerca de la temperatura corporal del bebé para no causar molestias, es decir, aproximadamente 36 ° -37.5 ° C. La temperatura del aire debe mantenerse al menos a 24 ° C.
Cómo bañar adecuadamente a un recién nacido
Bañar a un bebé es un proceso muy responsable y debes abordarlo con toda seriedad. Para que el baño no cause lesiones físicas o no psicológicas al niño, se deben seguir varias reglas. En primer lugar, debe tomar las migajas correctamente. La mano izquierda debe sostener la cabeza del bebé y la mano derecha debe estar justo por encima de la cadera. La posición de las manos puede reflejarse en el lado opuesto si el baño es para zurdos. Es necesario bajar al recién nacido al agua muy lenta y cuidadosamente, como si lo introdujera en el agua. Es mejor mojar inicialmente las piernas o los brazos para que el bebé se sienta seguro. Luego puede sumergir al bebé por completo, el agua no debe cubrir al bebé más que hasta la línea del pecho. Es necesario lavar cuidadosamente todos los pliegues, prestando atención al cuello, el área de la ingle, los pliegues de los brazos y las piernas.
Con que frecuencia bañar a un recién nacido
Debe bañar a su hijo no más de 1 vez al día. Como tal, un recién nacido no necesita limpieza, el baño es más un proceso de aclimatación y endurecimiento para él, así como un excelente medio para aliviar el estrés antes de acostarse. En la temporada de calor, también puede limpiar los pliegues con un hisopo o una toalla suave humedecida con agua tibia, preferiblemente hervida.
Al bañar a un bebé del primer mes de vida, no es necesario usar constantemente jabón o productos de baño, es suficiente usarlos 1-2 veces por semana. Es mejor lavarse el cabello con champú no antes que si su bebé tiene 2 meses.