Las frutas son de gran beneficio para un cuerpo en crecimiento, por lo que un niño debe acostumbrarse a comerlas desde una edad temprana. Sin embargo, varios alimentos pueden causar alergias o contener semillas que un niño pequeño puede tragar accidentalmente, por lo que deben administrarse con precaución si el niño es menor de 2 años. Una de estas frutas es la granada.
Los beneficios de la granada
La pulpa de granada contiene 15 tipos de aminoácidos que mejoran la función cerebral. Además, esta fruta es una fuente activa de vitamina C, un potente antioxidante que fortalece los sistemas endocrino y nervioso. La vitamina B, que se incluye aquí, es responsable de la formación de hemoglobina, el funcionamiento del sistema nervioso y el crecimiento del tejido muscular, y numerosos ácidos de frutas ayudan en la absorción de oligoelementos.
Un componente de la pulpa de granada como el calcio proporciona un beneficio separado para el cuerpo del niño, sin el cual la formación de huesos, cabello y uñas es imposible. El estado de los músculos y los huesos también se ve influido positivamente por el potasio y el fósforo, que están presentes en grandes cantidades en la granada. Por lo tanto, esta fruta parece un producto ideal para un cuerpo en crecimiento, pero si el niño aún es demasiado pequeño, tendrá que limitarse al jugo de granada.
Cómo regalar granadas a un niño correctamente
La edad de dos años ya es adecuada para el conocimiento activo del bebé con una comida variada y saludable. Al mismo tiempo, es importante que el niño no sea alérgico, especialmente a la fructosa. Además, a los dos años, es poco probable que los niños puedan comer pulpa de granada de forma ordenada y segura, que contiene muchas semillas pequeñas. Por lo tanto, es necesario exprimir el jugo fresco de la fruta y darle al niño una muestra en la cantidad de una cucharadita con la adición de agua hervida en una proporción de 1: 1.
Si no se observan reacciones alérgicas dentro de 2-3 días, y el bebé bebe voluntariamente jugo de granada, la porción diaria se puede aumentar a 100-150 ml. Esta cantidad será suficiente para saturar el cuerpo con todas las sustancias útiles. Exceder la dosis diaria de vitaminas y minerales a esta edad puede provocar no solo alergias, sino también diversas enfermedades, especialmente enfermedades gastrointestinales.
En cuanto a toda la pulpa de granada, se recomienda enseñarle a un niño solo después de tres años, habiendo mostrado cómo comer la fruta correctamente. No se debe ofrecer más de la mitad de la fruta entera por día. La granada entera puede ser consumida por un niño solo a la edad de siete años. Solo entonces no se ejercerá ningún efecto agresivo en su cuerpo.