Para una mujer, la mejor confirmación de la fiabilidad y la solidez de un matrimonio es el nacimiento de un hijo. Pero, ¿qué pasa si un hombre no apoya la conversación sobre los hijos conjuntos? Y la mujer responde a todas las preguntas de forma evasiva, que aún no está preparada o se refiere a dificultades materiales. Una mujer se enfrenta a una elección: someterse a un hombre y esperar el nacimiento de un hijo o intentar lograr su objetivo por cualquier medio.
Instrucciones
Paso 1
En primer lugar, tratemos de averiguar cuál es la razón por la que su compañero no está dispuesto a tener un hijo. Puede ser miedo a cambios drásticos en la vida. Está claro que el nacimiento de un hijo cambiará para siempre la vida de los padres, introducirá en ella la necesidad de cuidar a una persona indefensa, mostrar responsabilidad y privar a algunos de su libertad. Un hombre de cualquier edad en el fondo es un niño y le resulta difícil compartir su atención con otra persona. Le asusta el hecho de que la mujer ya no le pertenecerá solo a él. A partir del momento en que nace el niño, un hombre de verdad tendrá que convertirse en el cabeza de familia con todas las consecuencias consiguientes.
Paso 2
Una mujer inteligente no presionará a su amado, utilizando métodos agresivos o persuasión prolongada. Esto solo puede llevar al hecho de que el hombre intentará por todos los medios evitar hablar del niño. Del mismo modo, las amenazas expresadas en forma de ultimátum no producirán el efecto deseado. La tarea de una mujer es llevar al hombre a la idea de que él mismo quiere un hijo. Una conversación confidencial y tranquila sobre un futuro en común debería convencerlo de que una mujer ama lo suficiente tanto a su esposo como a sus hijos. Por supuesto, una conversación de este tipo no será suficiente, pero no es necesario forzar los eventos.
Paso 3
Poco a poco, el hombre comprenderá que el niño no solo no destruirá, sino que, por el contrario, fortalecerá a la familia. Utilice el ejemplo de los amigos de la familia, visítelos. Pero solo si la pareja está bien y no demore la visita por primera vez. Es bueno que el padre del niño le hable a su compañero y le cuente con su ejemplo cómo cambió su vida con la aparición del bebé. Pero contará no solo sobre las dificultades, sino también sobre las alegrías de una familia en toda regla.