Hay dos mujeres importantes en la vida de un hombre: una madre y una esposa. A veces surgen celos y malentendidos entre ellos. Si le parece que su hombre está más apegado a su padre, no necesita comenzar una guerra y amenazar con el divorcio, busque soluciones pacíficas pero efectivas.
El amor por mamá y esposa es muy diferente, no se pueden comparar. Pero solo el tiempo para ambos no siempre es suficiente, por lo que surge la fricción. Debe entenderse que es imposible elegir entre estas damas, una no puede traicionar a la una por la otra, y por eso vale la pena buscar soluciones alternativas. Y la mayoría de las veces, en tal situación, es la esposa quien tendrá que hacer cambios en su vida, tratar de distanciarse de sus padres.
Amor por mamá
El afecto fuerte por la mamá a menudo surge en aquellos hombres que crecieron sin un padre. La mujer pasó toda su vida criando a su amado hijo, hizo todo por su felicidad. Por eso se siente obligado y comprende que fuera de él no hay nada importante en la vida de un padre. Es imposible apartarse de ella, porque esto equivale a una traición. Y ella, a su vez, no quiere dejar ir a su hijo, no entiende cómo construir su existencia sin él.
Mamá nunca deja a su hijo, no traiciona, no lastima. Se siente protegido junto a ella. Y si intenta separarlos, se produce un trauma grave, que puede llevar a un deterioro en las relaciones con su cónyuge. Es importante no prohibir la comunicación, no privar de esta oportunidad, sino simplemente separar dos familias, definir las reglas de su espacio.
Buena relacion con los padres
Para que no parezca que mamá es más importante, necesitas vivir por separado. Luego habrá un espacio para la esposa, donde ella es la amante y la mujer amada, y el lugar de la madre, donde puedes visitar regularmente. Si su esposo se niega a vivir sin su madre, proponga una variedad de razones para irse, pero no grite, no lo chantajee con el divorcio o cualquier otra cosa. Cualquier escándalo solo agravará la situación, se necesitan argumentos reales y no solo emociones.
Hazte amigo de la madre de tu cónyuge, no la conviertas en enemiga. Muchas veces su palabra es más importante que la tuya, porque lleva muchos más años con su hijo, por lo que de nada sirve entrar en un enfrentamiento. Demuéstrele que no le quitará al chico, que está a favor de la comunicación frecuente. Pídale consejo, interese por la salud, haga pequeños obsequios. Su ubicación te será de gran ayuda.
Si hay competencia, debes mostrar tu amor. Y hacerlo sin críticas, pero con honestidad y mucha sinceridad. Muestre su amor por su esposo, cuídelo, muestre respeto y fe en él. En este caso, verá que no lo está haciendo para demostrarle algo, sino simplemente así. Este será el argumento más importante. El que regañe al enemigo, perderá en esta pelea. Pero es mejor no participar en tales guerras, ya que no siempre es posible contener la ira.