"Se necesitan todo tipo de madres, todo tipo de madres son importantes": el viejo poema de Sergei Mikhalkov no ha perdido su relevancia hasta el día de hoy. Se convierten en madres independientemente de su edad, condición social y profesión elegida.
Una mujer de cuarenta años, por regla general, ya es capaz de tomar decisiones deliberadas y su elección no está tan fuertemente influenciada por factores externos (la opinión de otros, familiares, posibles dificultades materiales), tiene más confianza en su habilidades y tiene experiencia de vida. Estudiar, construir una carrera, actividades creativas, el deseo de pasar tiempo en empresas ruidosas pueden reemplazarse por pensamientos sobre la familia y el niño. Al pensar en la procreación, debe sopesar los pros y los contras.
La gran ventaja de las mujeres en edad "madura" es a menudo la independencia financiera, la experiencia de vida y una carrera establecida. Todos estos factores le permitirán disfrutar plenamente de la maternidad, sin lamentar las oportunidades perdidas, como, lamentablemente, ocurre con las madres jóvenes que tienen que pasar varios años en casa.
La edad no debería ser un obstáculo: los médicos hoy en día consideran que los 40 años son una edad femenina completamente reproductiva. Con la ayuda de herramientas de investigación modernas y diagnósticos de laboratorio, los médicos han logrado grandes avances en el manejo del embarazo. Hoy puede elegir un médico e incluso una clínica según sus deseos y capacidades financieras.
Cuando una mujer que quiere dar a luz llega a los treinta años, los expertos advierten de los posibles riesgos. Con la edad, aumenta el riesgo de tener un bebé con enfermedades congénitas o anomalías genéticas. Al mismo tiempo, la medicina moderna le permite controlar el crecimiento y desarrollo del embrión desde las primeras etapas del embarazo. Y si encuentra algún problema, tome las medidas necesarias a tiempo.
Se sabe que solo acercándose a los 40 años o después, muchas madres estrella se aventuraron en su primer hijo: por ejemplo, la famosa presentadora de televisión ucraniana Alla Mazur recientemente se fue de baja por maternidad a la edad de 42 años. Susan Sarandon dio a luz a su primer hijo a los 39 años, aunque durante mucho tiempo los médicos le negaron la posibilidad de tener hijos. La fotógrafa de culto Annie Leibovitz, que ha trabajado con publicaciones como Vogue y Vanity Fair, se convirtió en madre a los 51 años.