Con el comienzo de la introducción de los alimentos complementarios, los padres se enfrentan a muchas preguntas sobre qué tipo de puré alimentar al niño y si comprar uno de fábrica o cocinarlo ellos mismos. En la práctica, hacer puré de frutas o verduras frescas es bastante sencillo.
Necesario
- - verduras o frutas;
- - rallador
- - licuadora.
Instrucciones
Paso 1
Antes de hacer un puré para un niño, estudie cuidadosamente las frutas o verduras compradas. Es deseable que sean locales. Estas frutas contienen más nutrientes y el riesgo de reacciones alérgicas es menor que en el caso de comer verduras importadas. Las frutas deben estar intactas, sin daños ni signos de podredumbre.
Paso 2
Lave bien las verduras o frutas con un cepillo, luego pélelas, corte las partes duras como los tallos de coliflor, quite las semillas y los granos, si los hubiera. Las frutas dulces no requieren tratamiento térmico, basta con picar las frutas en un rallador y pasarlas por un colador o batir en una licuadora. Use ralladores de plástico o de acero inoxidable para moler. Al contacto con el metal común, la vitamina C se evapora y el puré pierde sus propiedades beneficiosas.
Paso 3
Al preparar el puré de verduras, pique la comida en trozos pequeños y colóquela en agua hirviendo, tapando la sartén con una tapa. Si el niño es propenso a las alergias, es recomendable remojar previamente una verdura como las papas en agua durante 6-8 horas. Por lo tanto, el exceso de almidón desaparecerá y provocará erupciones cutáneas.
Paso 4
Hervir las verduras hasta que estén tiernas, luego picarlas hasta que estén suaves. Para que el puré sea más tierno, se puede diluir con una pequeña cantidad de leche materna, mezcla o caldo de verduras. La sal, el azúcar y otros aditivos aromatizantes no se agregan a la nutrición de los niños menores de un año. A medida que el bebé crece, se agregan vegetales o mantequilla al puré de vegetales.