Una mujer que se encuentra en las últimas semanas de embarazo monitorea de cerca cualquier sensación inusual. Literalmente, cada contracción del útero puede confundirse con el inicio del trabajo de parto. Para no preocuparse por todos los asuntos, debe distinguir las contracciones falsas de las verdaderas.
Instrucciones
Paso 1
Si tiene menos de 37 semanas de embarazo y siente el tono uterino más de 4 veces por hora, acuda a su médico o sala de emergencias de inmediato. No se ponga usted ni el bebé en peligro, las contracciones regulares frecuentes probablemente signifiquen el inicio de un parto prematuro.
Paso 2
Después de 38 semanas, estas contracciones ocurrirán normalmente al menos una vez por hora. Se les llama precursores del parto, estas sensaciones están asociadas con el acortamiento y ablandamiento del cuello uterino, es decir. su preparación para el proceso de nacimiento. Controle cuidadosamente sus sentimientos, si las contracciones no se intensifican y no se vuelven más frecuentes, entonces esto aún no es el parto.
Paso 3
Las falsas contracciones se pueden distinguir por varias apariencias. No se intensifican en una hora y el intervalo entre ellos no disminuye. Los factores provocadores son la actividad motora del feto, la vejiga llena, el sexo. Observa el tono del útero. Si, después de los factores anteriores, tiene calambres o dolores de tirón periódicos en la parte inferior del abdomen, y en una hora no se intensifican o incluso desaparecen por completo, entonces estos no son precursores del parto.
Paso 4
Si aparecen estos signos, acuéstese un rato si antes estaba de pie. O, por el contrario, sal a caminar si antes descansaste. Tome una ducha tibia, beba una taza de leche tibia o un té de hierbas relajante. Si todo va bien, no tienes que preocuparte.
Paso 5
Pero en el caso de que note una secreción abundante del tracto genital, transparente o mezclada con sangre, tiene un dolor de espalda inusual o una presión severa en el área pélvica; consulte a un médico de inmediato. También busque atención médica si sus contracciones se vuelven más regulares y nota que los intervalos entre las contracciones se reducen. Lo más probable es que haya comenzado el trabajo de parto.