La atención y la capacidad de concentrarse son componentes muy importantes en el desarrollo de un niño. El proceso de aprendizaje, que dura toda la vida de una persona, se basa completamente en estas habilidades. Por lo tanto, a través de ejercicios apropiados, los padres deben desarrollar la atención en el niño durante el juego si quieren que se convierta en un adulto exitoso.
Instrucciones
Paso 1
Una de las variedades es la atención visual, que participa principalmente en el proceso de cognición. El desarrollo de la atención visual se realiza mejor con la ayuda de imágenes coloridas. Por ejemplo, puede tomar imágenes similares, pero no iguales, y pedirle al niño que encuentre las diferencias entre ellas. También puede invitar al niño a considerar la trama de la imagen para que recuerde y cuente lo que está representado en ella. Los juegos de puntos desarrollan bien la memoria visual, cuya esencia es conectar puntos y líneas para obtener un dibujo completo.
Paso 2
No obstante, el niño percibe la mayor parte de la información de oído. Por lo tanto, la tarea de los padres es enseñar al bebé a mantener la atención de forma independiente en la información importante. Los métodos más simples son leer, ver las obras de los niños y visitar centros de desarrollo. Sin embargo, es posible desarrollar la atención auditiva mientras se juega. Tome objetos con diferentes texturas: papel de aluminio, madera, agua, etc. Pídale al niño que cierre los ojos y escuche el sonido que escucha: crujir, verter agua, etc. Es importante que el niño comprenda de qué objeto proviene el sonido.
Paso 3
El desarrollo de la observación está estrechamente relacionado con el desarrollo de la atención. Entrena mejor a través del juego en grupo. Invite a un niño a observar la apariencia de otro y a memorizar detalles individuales. Luego, el bebé se da la vuelta durante un par de minutos y el otro participante cambia la disposición de las partes o presenta algo nuevo. La tarea del niño que recuerda es adivinar qué ha cambiado y qué está fuera de lugar. Desarrollan buena observación y asociaciones. Por ejemplo, dígale a su hijo qué animal vive dónde y qué come para que pueda asociar el objeto con sus componentes.