Trate de hacer tiempo para usted y su hijo todos los días. No es necesario planificar cada minuto de estar con su hijo. Basta con estar juntos en la misma habitación y ocuparse de sus asuntos.
Las relaciones entre padres e hijos no siempre son buenas. Para establecerlos, debes escuchar algunos consejos:
1. Escuche a los niños pase lo que pase. El mundo del niño a menudo no obedece las leyes del entorno adulto. Por lo tanto, mamá y papá deben escuchar atentamente a su hijo en cualquier lugar y en diferentes circunstancias: cuando trabajan juntos, durante el entretenimiento o de camino a casa. Es importante para los niños que las personas queridas escuchen y comprendan la historia sobre diferentes situaciones de su vida.
2. Escuche a los niños hasta el final. No interrumpa a su hijo ni le dé consejos prematuros antes de que se haya expresado por completo. Las conclusiones apresuradas de un padre solo pueden dañarlo y socavar su confianza en los adultos.
3. No exagere con las predicaciones. Los niños nunca compartirán sus impresiones y vivencias con aquellos padres que, después de escucharlos, comienzan a leer una aburrida y larga charla sobre lo “malo” y lo “bueno”, y cómo afrontarlo todo.
4. Castigar y elogiar con moderación. La disciplina debe ser justa. Los padres deben comprender que todos los niños son traviesos y cometen delitos menores. El niño ya no compartirá sus fracasos con ellos. En cualquier situación, el niño debe explicar con calma cómo actuar en una situación determinada.
5. Trate de comprender la cultura de los niños. Todos fueron niños alguna vez, escucharon música incomprensible para los adultos, vestían ropas inusuales y hablaban con amigos en una jerga determinada. Los padres no deben "meterse" groseramente en el mundo del niño, independientemente de su opinión y preferencias, de lo contrario, debido a las críticas constantes, puede retirarse a sí mismo. Después de todo, algún día pasará por él.
6. Introduzca la tradición familiar. Las familias modernas definen días para el esparcimiento o el deporte, lo que se convierte en una agradable tradición, los hace más fuertes y amigables.
Y recuerde siempre dar el ejemplo a sus hijos. El niño quiere ser como mamá y papá y nota cómo los padres se comunican con otros adultos, adoptando sus hábitos y comportamientos.