Si le pregunta a un niño pequeño qué cualidades tienen sus parientes, lo primero que dirá es "amable". Esto es lo primero que ve en las personas que lo rodean. Con la edad, además de la amabilidad, los niños aprenden a resaltar otras cualidades: inteligencia, belleza, humor. Y la bondad se convierte en algo natural.
Si les hace la misma pregunta a los padres, es decir, cómo quieren ver a sus hijos, entonces una cualidad como la bondad tampoco estará entre las primeras. Por lo general, muchos responden a esta pregunta en sentido figurado, diciendo que el niño debe darse cuenta de sí mismo como persona, encontrar su propio camino.
Pero la bondad es el rasgo principal de una persona, que lo ayudará a volverse inteligente, honesto, atento a su vecino y, en general, a encontrarse a sí mismo.
¿Cómo se puede criar a un niño para que sea amable?
Esta pregunta es difícil de responder de inmediato. Después de todo, la bondad es un concepto colectivo e incluye muchos otros conceptos, como sensibilidad, capacidad de respuesta, compasión, compasión, misericordia, cortesía y muchos otros. Y cada uno de ellos también necesita aprender. Una cosa es mostrar compasión y ayudar a alguien que lo necesita, otra es sentir lástima por un gatito sin hogar y la tercera es mostrar moderación y no responder con rudeza a algo que es completamente desagradable de escuchar.
Ejemplo personal
Lo primero es lo primero, los padres deben demostrar su amabilidad con el ejemplo. La gente de la Iglesia se esfuerza por educar a un niño en la fe. Es importante darles una buena educación, así como enseñarles a ser independientes. Será fácil para un niño así ser amable. Visite a los miembros de la familia que hayan sido admitidos juntos en el hospital o lleve juguetes al orfanato. Haga todo esto con su hijo. Entonces, desde la infancia le inculcará el cuidado y la compasión por las personas. Trate de mostrarle a su bebé lo importante que es la comunicación simple para las personas mayores, incluso si ha escuchado sus historias más de una vez. Recuerde, algún día usted mismo envejecerá y el niño seguirá su ejemplo para comunicarse con usted.
Generosidad
Adquiera el hábito de compartir todo para todos, entonces sus hijos serán amables. Después de todo, cuando hay mucho de algo, es fácil compartirlo. Es importante aprender a compartir lo que no es suficiente. También enseñe a los niños a dar regalos, y usted necesita dar algo valioso, pero no en detrimento de ellos mismos. Muéstrele a su hijo lo importante que es elegir el regalo adecuado, aunque sea económico. Es muy bueno cuando los niños y los padres comparten juguetes o cosas que ellos mismos no necesitan. Por supuesto, puedes tirarlos, pero sería mucho mejor dárselos a los necesitados. Este también es un proceso educativo.
Solo nuestro ejemplo personal ayudará a criar a un niño para que sea amable y cariñoso. Y habiéndonos recogido, les mostraremos a nuestros hijos lo que deben ser.