Cuando un niño aparece en una familia, siempre es una alegría. Estamos felices de ver a los niños: cómo crecen, se desarrollan y aprenden sobre el mundo. No hay mayor felicidad que ver a un niño sonreír. Pero los niños no siempre traen solo emociones positivas. Son traviesos, se esfuerzan por hacer todo a su manera y no siguen nuestros consejos. Esto se puede solucionar.
Necesario
Paciencia, habilidad para encontrar compromisos, imaginación, autocontrol, humor
Instrucciones
Paso 1
Paciencia y paciencia de nuevo. Los niños, especialmente los pequeños, reaccionan de manera muy aguda a nuestra condición. Los niños tienen un vínculo emocional muy fuerte con sus padres. Y si el niño nota que estás nervioso, tu nerviosismo se le transmitirá. Empezará a ser caprichoso e insistirá por su cuenta. Y tienes objetivos completamente diferentes.
Paso 2
Use su imaginación. Cuanto más pequeño sea el niño, más fácil será distraer su atención. Sin embargo, los niños mayores también pueden cambiar a lo que les ofreces si lo hacen de manera lúdica. Lo principal es darle al niño la impresión de que él mismo quería hacer esto. Y la forma de juego es óptima para esto.
Paso 3
Mantenga la calma y sea positivo. El niño no siempre se apresura a cumplir con nuestras solicitudes de inmediato. La mayoría de las veces, encuentra muchas excusas para no hacer un trabajo tedioso, por ejemplo, recolectar juguetes o dar lecciones. Pero es necesaria una actitud benevolente en este caso. Nunca le levante la voz al niño; el resultado será su respuesta gritando y aún más desobediencia.