Las estadísticas dicen que el 90% de los bebés tienen caries en los dientes de leche. Los primeros dientes que aún no se han formado se deterioran rápidamente y, a veces, traen muchas sensaciones desagradables al bebé. La mala nutrición, la higiene bucal irregular y las enfermedades crónicas empeoran la salud dental del niño.
¿Qué alimentos estropean rápidamente los dientes de un niño?
La mala calidad del agua del grifo, pobre en calcio, tiene un efecto perjudicial en todo el cuerpo del niño en general y en el estado de los dientes en particular.
Los productos lácteos, el pescado, el hígado, los huevos de gallina, las verduras crudas enriquecidas con calcio y flúor, así como las gotas de vitamina D, mejorarán el estado de los dientes de su bebé.
Alimentos blandos que prácticamente no necesitan ser masticados, el tratamiento térmico de los alimentos reduce su dureza y, por lo tanto, la fuerza de masticación. Si después de una comida le da a las migas vegetales crudos duros, como repollo o zanahorias, esto ayudará a limpiar sus dientes de forma natural y formar una carga de masticación. Los refrescos, las piruletas, la goma de mascar y el chocolate pueden dañar los dientes de su bebé y hacer que se ennegrezcan y se rompan. Las palomitas de maíz son peligrosas por la cáscara de maíz, que se atasca en los dientes y encías de un hombrecito, dañando los tejidos blandos de la cavidad bucal y provocando inflamación.
Dificultades para cuidar los dientes de los niños
A partir del segundo año de vida, después de cada comida, debe enjuagar la boca de su bebé. Pero más a menudo los padres lo olvidan. Y la placa permanece en los dientes de los niños. Además, el cepillado irregular de los dientes provoca la acumulación de bacterias, destruyendo los dientes de leche. Sin acostumbrar al bebé a cepillarse los dientes con un cepillo dos veces al día, se notará cómo la condición de las encías y los dientes empeorará con el tiempo. El cepillo de dientes permanente también es un destructor de los dientes de los niños, mientras que debe cambiarse cada 3-4 meses.
Para la higiene de los dientes de los niños, los dentistas recomiendan usar polvo de dientes en lugar de pasta de dientes.
Si el bebé tiene caries severas o un proceso inflamatorio en las encías, debe comunicarse de inmediato con el dentista, la negativa a visitarlo provoca complicaciones de la enfermedad. Los procedimientos del dentista pediátrico siempre son estresantes para los niños. Anticipándose al dolor, el bebé llora y pide no llevarlo al médico, pero la caries dental se extenderá de los dientes enfermos a los sanos.
Enfermedades crónicas y predisposición genética
Las enfermedades del tracto gastrointestinal, en particular la alta acidez del estómago, a menudo conducen a la destrucción de los primeros dientes del bebé. Cualquier enfermedad crónica inhibe la correcta formación de los dientes y su capacidad para masticar. Otra razón del rápido deterioro de los dientes es una predisposición genética a las enfermedades de la cavidad bucal. Suele reflejarse desde la primera infancia.
La clave para la salud de los dientes de los niños radica en la prevención y el tratamiento oportuno.