Si un niño está tratando de retratar algo con sémola, es hora de comprar pinturas, papel y crear. Los psicólogos creen que cuanto antes su hijo comience a dibujar, antes comenzará su desarrollo. Mientras aún sea pequeño, dibujaremos junto con el bebé y lo ayudaremos a dominar la técnica de artes visuales más sencilla. Para esto, las pinturas para dedos son las más adecuadas: no son tóxicas y se pueden lavar fácilmente con agua, se pueden comprar fácilmente en cualquier tienda que venda suministros de oficina.
Necesario
- Papel grueso (papel Whatman) o empapelado de adentro hacia afuera, es recomendable cubrir toda la mesa.
- Pinturas de dedos,
- Toallitas húmedas,
- La esponja es densa para cortar diferentes formas,
- Buen humor.
Instrucciones
Paso 1
Equipe su área de dibujo. Para hacer esto, puede usar una mesa para niños normal, cubriéndola con papel. Coloca pinturas de diferentes colores en frascos y diluye con un poco de agua. El bolígrafo del niño debe caber libremente en el recipiente para que pueda recoger la pintura fácilmente. Coloque una toalla húmeda cerca para secarse los dedos.
Paso 2
El ejercicio más sencillo, que le dará al niño una idea de sus grandes habilidades y posibilidades, serán las huellas de las manos, que dejará en su primer lienzo. Al mismo tiempo, se familiarizará con la técnica de la pintura, que consiste en quitar la pintura de los dedos con cada cambio de color.
Paso 3
Siéntese con su bebé y pruebe de qué color debe ser el sol. Sumerge tu dedo en la pintura elegida, dibuja un círculo y rayas.
Paso 4
Ahora puedes dibujar un mar o un río. Limpiar el bolígrafo del bebé, quitar la pintura y volver a sumergir el dedo en azul. Por el mar, no puedes arrepentirte de la pintura y mojar todos los dedos. Dibuja las olas.