Una de las razones importantes del surgimiento de los caprichos es el constante cumplimiento de los padres. Aparte de esto, hay otras razones que los padres deben investigar.
Al final del primer año de vida, el niño comienza a darse cuenta gradualmente de que si grita un poco, inmediatamente se le dará lo que quiera. Es durante este período que se establece el carácter del niño. Los padres sienten pena por castigar a un niño a esta edad. Y cuando el bebé empieza a gritar, a exigir algo, a menudo se escucha la siguiente frase: "Sí, dale, que no grite". Rápidamente recuerda y comprende esta frase.
Empeora con la edad, el niño crece demasiado caprichoso. Los niños de dos y tres años hacen berrinches en la calle y en la tienda. Y las madres se arrancan el pelo de la cabeza, preguntándose qué hacer y cómo reeducar al pequeño matón. En primer lugar, cabe señalar que esto es culpa de los padres. Por lo tanto, es mejor no seguir el ejemplo del niño y no criarlo malcriado, en este caso no habrá duda de cómo reeducar.
El niño quiere lograr su objetivo, y la reacción más correcta ante esta situación es la calma en relación a las emociones de los niños. Por ejemplo, cuando un niño pequeño en una tienda grita por un juguete nuevo, es mejor alejarse un poco de él. Se ofenderá un poco, pero definitivamente se calmará. Con el tiempo, el niño comprenderá que las rabietas no lo ayudan a lograr su objetivo. En ningún caso debe gritarle al niño o levantar la voz. No se calmará, ya que un niño a esta edad no está listo para comprender y aceptar el rechazo de sus demandas. Necesita dedicar más tiempo a su hijo. Si un niño está satisfecho y no quiere dormir, pero aún llora, no hay necesidad de enojarse inmediatamente con él, creyendo que simplemente está malcriado. Es posible que esté aburrido, quiera jugar con alguien y carezca de la atención de sus mayores. El niño no necesita ser mimado demasiado, es decir, para seguir su ejemplo. Se acostumbra a que todo le está permitido y se vuelve caprichoso y desobediente. Esto es malo no solo para los padres que ya no pueden hacer frente al niño. Esto es malo tanto para el bebé como para su futuro.
Los niños mimados por sus padres no podrán cuidarse solos en el futuro. Los niños crecen indefensos, esperando que sus padres le den un apartamento y un coche. Será difícil para las niñas encontrar marido, ya que buscarán en cada hombre al que cumpla todos sus caprichos. Necesitas criar a un niño con delicadeza, sin llegar a gritar. Por ejemplo, si un niño ve dibujos animados durante demasiado tiempo, no hay necesidad de apagar el televisor de manera desafiante y decirle "no". Debes interesarlo en algún otro negocio, por ejemplo, jugar juntos.
Y una regla más importante. Si los padres son impulsivos, entran en conflicto sin motivo y se excitan con media vuelta, no debes esperar nada más del niño. No estará tranquilo. Los bebés parodian a sus padres en todo hasta cierta edad. Y lo último que todo el mundo debería recordar es que no se puede golpear a un niño. Esto lo volverá agresivo. Es mejor buscar otras formas de castigo, como la privación de dibujos animados o algo sabroso.