Sudar es un proceso natural. Sin embargo, la sudoración excesiva indica que algo anda mal en el cuerpo. Las razones de esto pueden ser varias, peligrosas y no peligrosas.
Causas no peligrosas de la sudoración intensa y cómo eliminarla
El primer pensamiento que surge si su bebé está sudando es que tiene calor. Para restaurar la transferencia de calor normal, elimine el exceso. La ropa con la que duerme y juega el niño debe respirar y ser de tejido natural.
La temperatura ambiente agradable es de 18 a 20 ° C.
Durante el período de enfermedad, la reacción protectora del cuerpo aumenta la sudoración. Dado que este proceso no está completamente formado en los bebés, la sudoración profusa persiste durante aproximadamente un tercio del mes después de la enfermedad. En este caso, solo necesita esperar hasta que el cuerpo vuelva a la normalidad. El sudor puede ser una reacción a experiencias emocionales, positivas o negativas. Asegúrese de averiguar qué le preocupa a su hijo. Los niños también pueden sudar debido a su gran físico.
Es necesario controlar cuidadosamente el estado de la piel del bebé. El sudor irrita la delicada piel de los bebés y provoca dermatitis del pañal (picor). No deje a su hijo con ropa empapada en sudor durante mucho tiempo. Si es posible, tome baños con salvia, corteza de roble y otras hierbas o, como último recurso, limpie los pliegues del cuerpo del bebé con un hisopo de algodón humedecido en infusión de hierbas.
Causas peligrosas de la sudoración profusa y cómo eliminarla
Sin embargo, no debe considerar la sudoración abundante como algo común, ya que puede ser una señal de una enfermedad grave. Asegúrese de informar a su médico sobre esto. Lo primero que intentará comprobar es la cantidad de vitamina D en el cuerpo del bebé. Si no es suficiente, comienza a desarrollarse raquitismo. En este caso, el médico prescribirá una ingesta de vitaminas y caminatas frecuentes en un día soleado. Si su hijo suda por la noche y el sudor es pegajoso y frío, el sistema cardiovascular puede funcionar mal. El bebé suda en reposo y la habitación no hace demasiado calor; es posible que exista una patología de la glándula tiroides. Los resfriados también pueden desencadenar una sudoración excesiva a medida que el cuerpo intenta regular la temperatura corporal y eliminar las toxinas.
En este caso, los médicos lucharán contra el problema y depende de usted garantizar condiciones cómodas para el bebé.
Cambie la ropa de su hijo con más frecuencia, asegúrese de que una corriente de aire no lo haga volar con la ropa mojada. Si no hay instrucciones especiales del médico, no es necesario que coloque al bebé en una habitación innecesariamente cálida (o use más abrigado). Esto provocará aún más transpiración. En cualquier caso, no entre en pánico, porque la mejor medicina para su bebé lactante es una madre tranquila y cariñosa.