Para que la salud del niño sea siempre fuerte, es necesario fortalecer constantemente su inmunidad. La inmunidad ayuda al cuerpo a combatir las infecciones y a volverse resistente a las sustancias nocivas.
Instrucciones
Paso 1
Prepare un baño caliente para su hijo durante el invierno. Mientras se sumerge en un baño caliente, se sumerge y emerge, experimentará algunos "microshocks" de un cambio inesperado de frío y calor. Esto ayudará al cuerpo a responder rápidamente a los cambios de temperatura.
Paso 2
Para la producción de partículas inmunes, un cambio de calor a frío ayudará. Esto requiere una sauna o un baño. Deje que el niño comience a endurecerse de 3 a 5 minutos, dejando la sala de vapor en una habitación fresca.
Paso 3
Ventile la habitación con regularidad, especialmente durante el invierno. Los expertos recomiendan mantener la temperatura ambiente a 23 grados centígrados.
Paso 4
Anime a su pequeño a que se lave las manos con más frecuencia, esto ayudará a reducir el riesgo de infección en un 50%.
Paso 5
Si su hijo viene de la calle congelado, dele un baño de pies caliente. Esto acelerará la circulación sanguínea en la garganta y las extremidades.
Paso 6
La inmunidad de los niños puede verse fácilmente debilitada por el humo de segunda mano. Proteja a su hijo del humo del tabaco.
Paso 7
Dele a su hijo más fruta y reemplace los dulces con frutos secos. Nutrición adecuada: tiene un efecto positivo en la salud del niño.
Paso 8
Las vitaminas ayudarán a proteger la salud. Dele vitaminas a su bebé todos los días.
Paso 9
No le dé a su hijo agua del grifo. Es mejor reemplazar el agua del grifo, por ejemplo, con agua de un manantial.
Paso 10
Camine más con sus hijos, esto ayudará a que sus intestinos funcionen. Después de todo, el correcto funcionamiento de los intestinos es la clave para una alta inmunidad.