Las hormonas son sustancias biológicamente activas que regulan los procesos vitales de todos los sistemas del cuerpo. Durante el embarazo, las hormonas cambian. Hay una hormona, cuya cantidad en el cuerpo femenino es especialmente significativa durante este período.
La principal hormona del embarazo, la hormona de la maternidad, se llama progesterona. Es él quien proporciona la preparación de la mucosa uterina para la unión del embrión, crea las condiciones óptimas para el embarazo. La progesterona afecta el sistema nervioso, preparando el cuerpo femenino para el embarazo y el parto. Suprime la actividad de los músculos del útero y reduce el rechazo del óvulo. Esta hormona estimula el crecimiento del útero, afecta la producción de leche en las glándulas mamarias. La progesterona en las mujeres se forma en los ovarios y las glándulas suprarrenales. Con su deficiencia, se puede diagnosticar la infertilidad: la célula fertilizada no puede permanecer en el útero durante mucho tiempo.
Cuando ocurre la fertilización, la placenta comienza a producir dosis mayores de esta hormona. Durante el embarazo, los niveles de progesterona aumentan quince veces. La cantidad de esta hormona determina el estado de la placenta, especialmente en la segunda mitad del embarazo. Por lo tanto, el análisis de progesterona es un paso necesario para diagnosticar la condición del feto. Se puede observar una disminución en su cantidad con la amenaza de interrupción del embarazo, con retraso en el desarrollo intrauterino del feto, con función insuficiente del cuerpo lúteo o placenta. Además, la progesterona ayuda a diagnosticar un embarazo prolongado. Además, la progesterona baja puede resultar de tomar ciertos medicamentos.
Si la progesterona está elevada, esto sugiere hemorragia uterina disfuncional, anomalías en el desarrollo de la placenta, alteraciones en la formación de hormonas en las glándulas suprarrenales, quiste del cuerpo lúteo o insuficiencia renal. Ciertos medicamentos pueden aumentar los niveles de esta hormona.
Es muy importante donar sangre correctamente para la progesterona y obtener resultados confiables. Para hacer esto, debe seguir las recomendaciones de su médico. Por lo general, se recomienda a las mujeres que donen sangre para esta prueba entre los días 22 y 24 del ciclo menstrual. Debe donar sangre estrictamente con el estómago vacío, preferiblemente por la mañana. Si una mujer tiene un ciclo irregular, la prueba se realiza varias veces.
La cantidad de progesterona producida se ve significativamente afectada por la ausencia o falta de proteína. Además, es posible elevar el nivel de progesterona con la ayuda de la terapia con vitaminas. El papel principal aquí lo desempeñan las vitaminas E y el grupo B. Por lo tanto, al planificar un embarazo, los cónyuges deben establecer la ingesta de estas vitaminas y consumir más productos proteicos: carne, cereales, pescado, soja.