Muchas personas usan el encanto, la inteligencia, el encanto y el humor sutil para lograr sus objetivos. Pero no todas estas cualidades son inherentes al nacimiento. Muy a menudo, para convertirse en una persona respetada en la sociedad, debe trabajar duro, incluso consigo mismo.
Instrucciones
Paso 1
Las mejores cualidades deben demostrarse en acción, no hablar de ellas. Liberarse de la presión de la esfera profesional y social solo lo logran personas muy fuertes, lo notarán y lo apreciarán en usted. Después de todo, siempre es bueno tener un empleado en el personal que tenga una gran fuerza de voluntad. Simplemente no vayas demasiado lejos, no te vuelvas arrogante con los demás.
Paso 2
Si se encuentra en una situación en la que el conflicto no puede evitarse, trate de no gritar para asustar a su oponente; a veces, el silencio expresivo es más terrible que gritar. Controle sus expresiones faciales y gestos, si es imposible entender lo que está pensando por su cara, entonces esto puede confundir a los oponentes e intimidar.
Mire directamente, sin pestañear, entrecerrando levemente los ojos, a los interlocutores. Hable con claridad, de manera uniforme, cuál cree que es el problema y cuál es la mejor manera de resolverlo.
Cada gesto debe ser pensado y hablar de su fuerza y confianza en sí mismo. También es necesario mostrar rabia y luego hacer un esfuerzo de voluntad para contenerla. Una persona que puede controlar su rabia es más intimidante que una que grita y agita los brazos.
Paso 3
Cuida tu apariencia. Ir al gimnasio. Un hombre, en primer lugar, debe prestar atención al entrenamiento de los músculos de los brazos y los hombros; son estas partes del cuerpo las que deben demostrarse con mayor frecuencia. Cómprese un traje clásico, incluso si no trabaja en la oficina. Te permitirá dar la impresión correcta a los demás.
Paso 4
Edúcate tu mismo. Aprenda un nuevo idioma extranjero, vaya de campamento, haga trabajo social o de caridad, aprenda a cocinar o asista a clases de baile. Todo esto te ayudará a convertirte en un conversador interesante. Cíñete al tema de conversación que te sea más cercano y no te involucres en lo que pueda revelar tus debilidades.