El tiempo corre. Nuestros hijos crecen. Aparecen nuevos problemas en la educación de los adolescentes. El desarrollo sexual ocupa un lugar especial. Es importante que los padres expliquen correctamente a los niños todo lo que sucede durante este período.
A la edad de 11 a 13 años, las niñas y los niños comienzan el proceso más complejo del cuerpo: la maduración de los genitales. Durante este período, se pueden notar cambios significativos en el cuerpo. En las niñas, las glándulas mamarias comienzan a crecer, resaltando y redondeando los senos. Los primeros pelos aparecen en las zonas axilar e ingles. Comienza la menstruación.
En los niños, mientras tanto, la voz pasa de la viola al bajo, los rasgos faciales infantiles y juveniles se transforman en más masculinos. Se produce contaminación. Se desarrolla la línea del cabello del cuerpo. Y al mismo tiempo, ambos sexos tienen pensamientos sobre las relaciones sexuales.
En este caso, nuestros hijos se convierten en niños y niñas. De otra forma, se les puede llamar adolescentes. Y muchos de ellos no solo piensan, sino que ya quieren traducir sus pensamientos en acciones, en realidad. Todos los adultos saben muy bien cómo pueden terminar las relaciones sexuales entre adolescentes. Y la principal tarea de los padres y adultos en esta etapa es cómo explicar correctamente la esencia de tales cambios físicos y relaciones.
Parecería que ser niño es mucho más fácil que ser niña. ¡Pero este no es el caso! Para los niños pequeños, cuya sangre "les hierve en las venas", están llenos de energía y deseosos de aprender lo desconocido, es muy difícil explicar las situaciones y las consecuencias que pueden aguardarles en esta etapa. Durante ese período, todos los sentimientos y pensamientos no están ocupados en absoluto con conversaciones y consecuencias, sino con lo que se esconde detrás de cambios tan obvios.
Pero todo padre debe hablar seriamente con su hijo, explicarle que las relaciones sexuales no son solo la fusión de dos cuerpos y carne, sino también sentimientos románticos, amor que ambos sexos se tienen el uno al otro. Y no deben ser manchados y contaminados por el momento de la lujuria. Además, es necesario inculcar al adolescente la responsabilidad del sexo opuesto.
En cuanto a las niñas, las madres, hermanas y abuelas entran en la batalla. Las abuelas, por cierto, son un claro ejemplo de pureza y espiritualidad en la relación entre una mujer y un hombre. Desde tiempos inmemoriales, una niña era considerada una novia noble si era casta y conservaba su virginidad y honor hasta el matrimonio. Por supuesto, toda niña a una edad temprana sueña con ser madre. ¡Pero todo tiene su tiempo!
El comienzo del ciclo menstrual de una niña es solo un indicador de que está madura para su futuro sueño, pero aún no está lista para ser madre. Y si no está listo, ¿qué pasa entonces, un aborto? La madre está obligada a decirle a su hija qué consecuencias pueden surgir si se realiza un aborto. Se trata de diversas enfermedades, cambios en el metabolismo de las grasas y lo peor es que el sueño de la hija puede que nunca se haga realidad (infertilidad). Por lo tanto, la niña no debe estropear lo único que se le da por cierto hombre. ¡Todo tiene su tiempo!