Las mujeres embarazadas también tienen que viajar en avión. Esto puede deberse al trabajo oa unas vacaciones largamente esperadas planeadas antes del embarazo, que no desea cancelar.
Antes de emprender un viaje, primero debe pensar en cómo reprogramará el vuelo. Por regla general, en los primeros meses de embarazo, muchas toleran bastante bien estar en el aire y sin complicaciones ni molestias. Sin embargo, es necesario consultar con su médico, porque si existe una amenaza de aborto espontáneo, los cambios en la presión en el avión pueden tener consecuencias indeseables que representan una amenaza tanto para el niño como para la madre. Incluso si el embarazo va bien, debe considerar si el vuelo se volverá estresante, ya que el miedo y el estrés pueden provocar un parto prematuro.
Si se toma la decisión de no abandonar el vuelo, es necesario garantizar la máxima comodidad en el camino. Para hacer esto, debe elegir un lugar donde sea espacioso; por regla general, esta es la primera fila o asientos en las salidas de emergencia. Si tiene dinero, es mejor dar preferencia a la clase ejecutiva. Tenga en cuenta que al elegir los asientos en la cola del avión, sentirá más turbulencias, lo que puede afectar negativamente al feto y a su bienestar. Durante el vuelo, intente moverse más; levántese cuando sea posible, cambie de posición en la silla. Para evitar la hinchazón, puede usar medias especiales.
Durante el vuelo, el sistema de aire acondicionado y ventilación está funcionando constantemente en el avión, lo que conduce a la sequedad de la mucosa nasal y la aparición de secreción nasal y dolor de garganta desagradable. Para evitarlo, beba más agua sin miedo a hincharse.
Consulte las políticas de su aerolínea antes de comprar boletos, ya que algunas aerolíneas no aceptan mujeres con más de 36 semanas de embarazo a bordo. Durante un período de 30 a 36 semanas, es posible que se requiera un certificado de un médico, así como la firma de una declaración de garantía que estipule que usted es responsable de las consecuencias del vuelo, no la aerolínea.
Si algo salió mal durante el vuelo, notifique al asistente de vuelo de inmediato. Si es necesario, una ambulancia lo recibirá en el aeropuerto de llegada.
Lo más importante es sintonizar positivamente el vuelo, y luego el tiempo en el avión pasará desapercibido y obtendrás emociones agradables del viaje.