La necesidad de una persona de un nombre personal y la complejidad de su estudio han fundado una ciencia separada e independiente: la antroponimia. El nombre de una persona, además del significado práctico, cultural, histórico y ético, tiene un carácter esotérico más profundo.
Nombres de estudios de ciencia
La antroponimia como ciencia especial que estudia los nombres de las personas se originó en 1887. Su nombre fue sugerido por el científico portugués J. Leite Vasconselva. Traducido del griego antiguo antroponímico significa: "anthropos" - una persona y "onoma" - un nombre.
La antroponimia es una ciencia social muy multifacética. El objeto de su estudio es el antropónimo, el nombre personal de una persona, así como la antroponimia, la interacción de estos nombres.
Esta ciencia se basa en el estudio de los patrones de uso del nombre, su origen, la totalidad de componentes individuales (apellido, patronímico, seudónimo, apodo). Además, explica la conexión del nombre con las cualidades humanas, la religión, con la historia de una persona: su genealogía, identidad nacional de una persona, profesión y tipo de actividad, origen geográfico e histórico.
Lo que hay en un nombre
El nombre de una persona se caracteriza en términos de astrología, numerología, composición de letras, correspondencia del nombre con el lugar de residencia y fecha de nacimiento. De gran importancia en la antroponimia es la compatibilidad de nombres y la elección de un nombre para un recién nacido.
Por ejemplo, según la fe budista o judía, los recién nacidos no pueden llevar el nombre de parientes fallecidos o personas fallecidas trágicamente.
Los parapsicólogos dicen que los nombres pueden tener suerte, traen buena suerte y viceversa. Y los científicos-astrólogos están seguros de que con la ayuda del nombre de una persona es posible encontrar y eliminar las causas de las dolencias y la mala salud, con el nombre es posible determinar el propósito de una persona y su posición en la vida posterior.
Científicos en el campo de la antroponimia
Un método científico no estándar en el estudio del nombre de una persona fue desarrollado por un científico, Doctor en Ciencias Químicas, Doctor en Astrología Felix Kazimirovich Velichko, actualmente es el consultor principal de la revista Horóscopo. Su método se basa en el estudio de la tonalidad semántica y emocional de cada letra del nombre de una persona con su posterior cálculo original.
Una gran contribución a esta ciencia fue hecha por el científico y teólogo ruso Florensky Pavel Alexandrovich, quien publicó la obra filosófica "Nombres" a principios del siglo XX.
Particularmente dignos de mención son los libros de Higer Boris Yuryevich, profesor, académico, doctor en ciencias psicológicas, que escribió unos 40 libros dedicados al estudio del nombre y su influencia en el carácter y el destino de una persona.