Cuando la casa está en orden, es fácil encontrar lo necesario, puedes invitar amigos en cualquier momento. Pero los niños tienden a esparcir sus cosas y juguetes, y ya no tienen la fuerza suficiente para recogerlos y ponerlos en su lugar, aunque en una situación en la que el bebé no puede encontrar un juguete, se enfada.
Los niños de 3 a 9 años necesitan ayuda para limpiar sus cosas y mantener la habitación ordenada. Al ayudar a los más pequeños, cada acción debe ser expresada: "Ahora ponemos los libros en la estantería, ponemos las pinturas en el cajón y ponemos los lápices en el vaso, ¿no?"
A un niño un poco mayor se le puede dar una pista: si divide la habitación en cuadrados y limpia uno a la vez, siempre estará en orden. Es importante que los niños dividan una tarea grande en partes pequeñas, cuya realidad es obvia para ellos. En los cuadrados ya eliminados, queda mantener el orden, lo que no es tan difícil.
Puede imprimir y colgar en un lugar visible un "conjunto de reglas" para ayudar a mantener el orden y la limpieza en la casa:
Después de usarlo, ponga lo que tomó en su lugar.
Cierra lo que abriste.
Recoge lo que dejaste caer.
Cuelga lo que te quitaste.
Limpiar o lavar lo que se ensucie.
De acuerdo, no dañarán a muchos adultos.
No es necesario tener muchos juguetes, porque cuanto más hay, más probable es el caos. Deje que el niño decore su habitación él mismo, entonces será más agradable para él limpiarla, porque este es “su territorio”.
Sin duda, si los padres dan un ejemplo de seguir algoritmos de limpieza, será un comportamiento natural para los niños. Y recuerda que lo principal en este negocio es no doblarte para no lograr el efecto contrario.