Skype es un programa gratuito para correspondencia, conversaciones, videochats de personas en muchos países del mundo. Algunas parejas utilizan el programa para practicar sexo virtual utilizando una cámara web.
La era de la tecnología informática ofrece a los jóvenes posibilidades ilimitadas. Y en términos de relaciones también. Una pareja enamorada ya no necesita escribir largas cartas de amor y enviarlas por correo o pagar una locura por las conversaciones. Y con la llegada del programa Skype, muchos tienen la oportunidad no solo de hablar con sus seres queridos, sino también de verlos. Algunos también aprovechan esta oportunidad con un propósito íntimo: tener relaciones sexuales.
¿Es inmoral o normal?
Para las parejas que están separadas por la distancia, tener sexo por Skype, según algunos psicólogos, es la única opción para evitar las trampas. En este contexto, el sexo virtual puede considerarse la norma. En primer lugar, así es como las parejas pueden aliviar la tensión sexual. En segundo lugar, las relaciones a partir de esto a menudo solo se vuelven más fuertes. En tercer lugar, realmente es una oportunidad para evitar la infidelidad.
Los mismos psicólogos no consideran, como algo inmoral, tener sexo por Skype y esas parejas que no están separadas por la distancia.
Tales acciones se ven como una oportunidad para agregar algo de variedad a la vida sexual. Para tener sexo por Skype, al menos debes confiar en tu pareja o estar muy relajado. Algunas parejas se limitan solo a conversaciones francas, mostrando sus cuerpos y caricias menores, que también es la norma para quienes están separados.
El sexo en la realidad virtual como patología
El sexo en Skype es una patología si es la única experiencia íntima para personas sanas y en toda regla. Es decir, si dos personas rechazan conscientemente el contacto sexual real a favor del sexo virtual a través de la pantalla, entonces esto es más una patología que una norma. Primero, participar en este tipo de sexo no es más que una masturbación pública. Y si este es el único contacto íntimo, entonces es una desviación y una patología. En segundo lugar, esta forma de tener relaciones sexuales a lo largo del tiempo puede provocar frigidez y asexualidad.
Es imposible decir de manera inequívoca que el sexo por Skype es una patología. Algunas parejas que, por alguna razón (separación, enfermedad) no pueden tener relaciones sexuales en realidad, pueden considerar el sexo temporal en Internet a través de una cámara web como la norma. Aquellos que no quieran entablar relaciones íntimas reales, prefiriendo masturbarse en público en el programa, deben buscar el consejo de un especialista. Es posible que para esas personas el sexo en Skype no solo sea una patología, sino también un trastorno psicológico muy peligroso.
