Cuando aparece un bebé en la casa, surgen muchas preguntas con él: cuál es la norma para un recién nacido y qué es una desviación de ella, cuándo debe preocuparse y preocuparse, y cuándo todo está en perfecto orden. Especialmente a menudo, las madres jóvenes se preocupan por la respiración del bebé. Esto no es sorprendente, ya que la respiración de los bebés es muy diferente a la de un adulto.
Instrucciones
Paso 1
La respiración de un bebé recién nacido es muy ligera, literalmente superficial. A veces es difícil entender si el bebé respira, especialmente en un sueño. Esta es la norma para los bebés recién nacidos.
Paso 2
Las primeras semanas de vida, el bebé respira de manera desigual, el ritmo respiratorio cambia constantemente, cualquier actividad o estímulo externo puede afectar el cambio en el ritmo. Después de un par de meses, la respiración del bebé se volverá más suave y estable.
Paso 3
La frecuencia respiratoria de un recién nacido es mucho más rápida que la de un adulto. La frecuencia promedio de un suspiro en el sueño de un bebé en el primer año de vida es de aproximadamente 35-40 por minuto; durante la vigilia, esta cifra será aún mayor. Esto también es completamente normal.
Paso 4
Los conductos nasales de los recién nacidos son muy estrechos, por lo que cualquier mota es suficiente para provocar un estornudo. En este caso, la tarea principal de los padres es no exagerar con cuidado. Si, además de los estornudos periódicos, no hay otros signos de resfriado en el niño, lo más probable es que todo esté en perfecto orden con él.
Paso 5
Pero una característica tan interesante de los bebés recién nacidos, como la incapacidad de respirar por la boca, requiere la atención de los padres. El caso es que en las primeras semanas, y en ocasiones meses de vida, el bebé simplemente no sabe cómo respirar aire por la boca, lo que significa que cualquier congestión nasal, debido a un resfriado o simplemente debido a la acumulación de moco, se vuelve un verdadero problema. Para no provocar dificultades respiratorias, debe controlar de cerca la higiene de la nariz del bebé. Una regla importante: solo se puede limpiar la nariz con un hisopo de algodón, en ningún caso con hisopos de algodón.
Paso 6
Otro problema común es el sonido de la respiración de los bebés recién nacidos. La estructura de los músculos de la laringe del bebé es tal que, al exhalar aire, a menudo hace un ruido de acompañamiento: el bebé huele o incluso ronca. Tiene sentido preocuparse, en este caso, solo si la bocanada del niño se acompaña de síndromes adicionales: el bebé se ahoga mientras duerme, hay una voz ronca, el estado general de salud empeora. Si no se observan síntomas adicionales, la respiración sonora desaparecerá gradualmente a medida que se desarrollen los músculos laríngeos. Por lo tanto, la mayor parte de la ansiedad asociada con la respiración de los bebés se debe principalmente a su originalidad. Al mismo tiempo, es importante comprender que la respiración de un recién nacido, como el estado de su salud en general, requiere una atención cercana, pero no excesiva, por parte de los adultos.