El número de trastornos del habla en los niños aumenta cada año. En relación con esta tendencia desfavorable, la urgencia del problema de prevenir los trastornos del habla en los niños se está volviendo global.
Instrucciones
Paso 1
Recuerde, cuanto más trabaje con su hijo y el desarrollo de su habla, más rápido podrá reconocer el problema. Aquí hay algunas cosas que deberían alertarlo.
Paso 2
Preste atención a la frecuencia con la que su bebé emite sonidos similares a los arrullos, los gorgoteos, escuche cómo balbucea. A los doce meses, debe prestar atención al hablante, o al menos imitar sonidos elementales.
Paso 3
Asegúrese de que el vocabulario de su bebé sea de al menos cincuenta palabras a la edad de un año y medio. A los dos años, debe usar combinaciones de dos palabras, ya los tres años, inventar frases cortas.
Paso 4
Primero, verifique si el bebé puede pronunciar los sonidos de las vocales de forma aislada de los demás. Vuela como aviones, tirando al mismo tiempo: "Oo-oo-oo". Deje que el bebé vea su boca. Después de varios intentos, muestre el avión en el libro, pregunte cómo zumba y vea si puede hacer ese sonido.
Paso 5
Lo mismo ocurre con otras vocales. A la edad de dos años, las palabras y onomatopeyas como "ku-ku", "mu-mu" y similares deben estar presentes en el habla. De lo contrario, póngase en contacto con un logopeda, él le aconsejará cómo hacerlo.
Paso 6
A los primeros signos de un defecto del habla, realice diariamente una serie de ejercicios simples con el bebé a un ritmo lento de 10 a 15 veces. Por ejemplo, pídale que apriete un lápiz pequeño con los dientes de manera que quede a través de la dentición y luego mueva la punta de la lengua hacia arriba y hacia abajo en el lápiz. O coloque una bola de pan en la punta de la lengua de su hijo y pídale que trague con fuerza mientras sostiene la bola.
Paso 7
Si le preocupa el desarrollo del habla de su hijo, hable con su pediatra. Quizás este problema deba resolverse con la ayuda del trabajo conjunto de ortodoncistas, dentistas pediátricos, así como logopedas y maestros en instituciones preescolares. Con su ayuda, puede, lo antes posible, identificar en el bebé trastornos miofuncionales que contribuyen a la aparición de patología del habla y tomar medidas efectivas para eliminarlos.