Una nutrición saludable para los niños sienta las bases para una vida plena, asegura su crecimiento, desarrollo físico y mental. Por ello, es imperativo que sea equilibrado y satisfaga todas las necesidades del niño, teniendo en cuenta su edad y necesidades.
Instrucciones
Paso 1
Sabroso o saludable.
Para empezar, los padres deben comprender que no importa cuánto lo intente, aún no podrá restringir completamente al niño de la comida rápida, el chocolate y las papas fritas. Todos los niños, de una forma u otra, pasan por un período de pasión por estos productos. Pero cuán persistente será depende completamente de los padres. La formación de hábitos alimentarios ocurre en el período de 7 a 11 años. A esta edad, el niño distingue perfectamente entre "sabroso" y "insípido". Y también desarrolla adicciones personales a la comida.
Paso 2
Lo principal es no asustar.
Como dice el proverbio más antiguo: "El fruto prohibido es dulce". Las sinceras conferencias sobre los peligros de la comida rápida solo despertarán el interés de su hijo por los alimentos poco saludables. Cuanto más le prohíba a su hijo, más probable es que el niño coma en secreto alimentos prohibidos. Hágalo una regla: ¡menos palabras, más acción!
Paso 3
Enfoque creativo.
Cuando le explique a su hijo que una pera es mucho más saludable que las papas fritas, no use la palabra "must". Por regla general, los niños siempre hacen lo contrario. Piense en el anuncio de los chocolates favoritos de su hijo e intente ser igualmente creativo e interesante en la promoción de alimentos sabrosos y saludables.
Paso 4
Haz un compromiso.
Todos los padres saben perfectamente a qué conduce la comida rápida. Sin embargo, si varias veces al mes le permite al niño comer lo que quiera, no le sucederá nada terrible. Después de todo, los niños son exactamente iguales a sus padres. Así que dé el ejemplo correcto a su hijo, no se permita demasiado.
Paso 5
Enciende tu imaginación.
En los niños, estos conceptos de las cosas se combinan sorprendentemente: conservadurismo e interés por todo lo nuevo. Si el niño, por ejemplo, se niega a comer remolacha hervida, puede hacer una ensalada interesante y sabrosa con manzanas o una naranja. La papilla de arroz aburrida puede convertirse en una papilla apetitosa con una variedad de frutas con la adición de mermelada, frutas secas o simplemente plátanos o fresas recién cortadas. Pero leche pura, en un cóctel de granada