Al amamantar, una mujer no ve exactamente cuánto comió su bebé, por lo tanto, no hay preocupaciones especiales sobre la nutrición. Pero en cuanto llega el momento de la introducción de los alimentos complementarios, la madre empieza a contar las cucharas y gramos de comida que quedan en el plato, no comidos por el niño, lo que sin duda agrava la situación y no afecta de la mejor manera al el estado de ánimo de la madre y el apetito de las migas.
Instrucciones
Paso 1
Las razones del rechazo de la comida por parte del bebé pueden ser su novedad, un color u olor fuerte, etc. Sin embargo, si el niño se niega a comer durante mucho tiempo, debe informar al médico sobre esto, tal vez esto sea una señal de la presencia de algún tipo de enfermedad. Recuerde, el apetito es un indicador importante de la salud del bebé. El exceso de trabajo, el sobrecalentamiento, el estrés emocional, etc. también reducen el apetito.
Paso 2
En primer lugar, debe calmarse y no entrar en pánico por el hecho de que el bebé come poco. Los gramos que no se comen hoy se pueden sobrecargar mañana, después de todo, el apetito de un adulto también cambia de un día a otro. Según los estándares médicos, un niño menor de un año debe consumir alimentos en la cantidad de 1/10 de su peso por día. Si su bebé está comiendo lo suficiente, puede calcular usando la fórmula: el número de comidas * la cantidad de comida por toma = 1/10 del peso de las migas.
Paso 3
Para aumentar el apetito de un bebé menor de un año, debe seguir estrictamente las reglas para la introducción de alimentos complementarios. Comience la introducción de un nuevo producto con ½ cucharadita, aumentando gradualmente la cantidad de porciones. La cantidad de alimentos complementarios vegetales a la edad de 7-8 meses es de 80 g, a los 9-12 meses - 120 gramos, uno a uno se introduce, cambiando gradualmente a una combinación de productos. La introducción de un nuevo plato debe posponerse en caso de enfermedad del bebé, durante el período de vacunación, un cambio de ambiente y otros factores desfavorables. El monitoreo de la reacción a un nuevo producto se lleva a cabo dentro de los 7-10 días, en este vez controlan la piel, las heces y el bienestar general del bebé. no reacciona bien a los alimentos complementarios, conviene abandonarlo por un tiempo y consultar a un médico. Comienzan alimentos complementarios con verduras a los 4, 5 años meses, si el bebé tiene alimentación mixta; a partir de los 6 meses - para quienes son amamantados. Después de la introducción de verduras, puede comenzar a familiarizarse con las frutas y, a partir de los 8 meses, con la carne. Ahora los pediatras recomiendan introducir un huevo en alimentos complementarios más cerca de un año.
Paso 4
Para no acabar con el apetito de las migas, siga estas sencillas reglas para comer:
- no permita bocadillos entre comidas y no sobrecargue al niño con la bebida;
- no viole la dieta: comer a ciertas horas contribuye al trabajo rítmico del sistema digestivo;
- alimente a su bebé en un ambiente relajado y de buen humor;
- no entretener al bebé mientras come: así come el niño sin notar la comida;
- estar al aire libre con más frecuencia, dejar que el bebé "despierte" el apetito;
- use cubiertos y platos brillantes, cambiándolos periódicamente por otros nuevos;
- más cerca del año, cuando el bebé ya ha crecido y participa activamente en el proceso de comunicación, coma con él lo que come y, al mismo tiempo, demuestre lo deliciosa que está.
Paso 5
El apetito es un asunto delicado, pero para mantenerlo, céntrese en la utilidad, no en la cantidad ingerida. La comida preparada por uno mismo a partir de productos naturales es saludable y nutritiva. Proporciona energía al cuerpo durante mucho tiempo.