¿Qué Vitaminas Son útiles Para Un Niño De Un Año?

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¿Qué Vitaminas Son útiles Para Un Niño De Un Año?
¿Qué Vitaminas Son útiles Para Un Niño De Un Año?
Anonim

Desde el primer año de vida de un bebé, los padres cariñosos comienzan a pensar en introducir vitaminas en su dieta. Por lo general, hasta un año, los niños son amamantados y reciben todas las sustancias necesarias de la leche materna. La única excepción es la vitamina D "soleada", que es necesaria para la prevención del raquitismo.

¿Qué vitaminas son útiles para un niño de un año?
¿Qué vitaminas son útiles para un niño de un año?

Vitaminas para un niño: ¿un capricho o una necesidad?

Después del primer cumpleaños, el bebé cambia gradualmente a alimentos para adultos y usa cada vez menos leche materna y alimentos para bebés, enriquecidos con todas las sustancias y microelementos necesarios. El niño crece y se desarrolla, se forman su esqueleto, órganos internos y cerebro. Su desarrollo físico, intelectual y mental depende de lo bien que coma el bebé.

El cuerpo en crecimiento de un bebé necesita vitaminas mucho más que un adulto, ya que un adulto ya ha formado completamente los tejidos óseos, los órganos internos y el sistema nervioso. Solo a la edad de 11 años, la necesidad de vitaminas del niño prácticamente no diferirá de las necesidades de los adultos. Hasta esta edad, los padres deben cuidar una dieta equilibrada y variada del bebé y el uso de complejos vitamínicos adicionales.

Vitaminas importantes para un niño de un año

Un bebé de esta edad necesita todas las vitaminas, pero las vitaminas A, B1, B2, B6, C, D y la niacina son especialmente importantes.

La vitamina A ayuda a fortalecer el sistema inmunológico, el tejido muscular, promueve el desarrollo esquelético, previene el desarrollo de enfermedades oculares, mejora el funcionamiento del hígado y el tracto respiratorio. El cuerpo puede obtener vitamina A de los vegetales verdes y amarillos, la yema de pollo, la leche, el aceite de pescado, el hígado, así como de los amados por los niños, las frambuesas, los arándanos y las moras.

Las vitaminas B tienen un efecto positivo general en el cuerpo en general. Su uso promueve la producción de glóbulos rojos, mejora la función hepática, fortalece el sistema nervioso y mejora el apetito. El trigo sarraceno y la avena, los huevos, los productos lácteos, el pescado, las huevas de pescado, las manzanas y las patatas son ricas en vitaminas de este grupo.

El ácido ascórbico es un elemento esencial para el correcto desarrollo de los huesos, dientes, vasos sanguíneos, así como del sistema nervioso y las defensas del organismo. La falta de vitamina C suele provocar resfriados frecuentes, depresión y escorbuto. Comer frutas cítricas, caldo de rosa mosqueta, así como cebollas verdes y chucrut ayuda a reponer su falta en el cuerpo.

La vitamina D, que es muy importante para el organismo en crecimiento, es la vitamina D. La vitamina "solar" promueve la absorción de fósforo y calcio, que son vitales para el crecimiento y la formación de los dientes y huesos de un niño. Esta es quizás la única vitamina que se prescribe a los niños desde los primeros días de vida para prevenir el raquitismo. La vitamina D se encuentra en pequeñas cantidades en los productos lácteos y la yema de huevo. El cuerpo produce esta vitamina en cantidades mucho mayores cuando la piel entra en contacto con los rayos del sol.

La vitamina PP ayuda a mejorar la piel, las mucosas intestinales y la cavidad bucal. La falta de ácido nicotínico en el cuerpo se manifiesta por indigestión, irritación de la piel y pérdida de peso. La vitamina PP se encuentra en carnes magras, pescado, quesos, hígado y levadura de cerveza.

A partir del primer año de vida de un bebé, debe considerar cuidadosamente su nutrición. Es necesario diversificar la dieta, incluyendo alimentos ricos en vitaminas y minerales. En este caso, no se debe renunciar al uso de complejos vitamínicos. Las vitaminas deben elegirse por recomendación de un pediatra que haya evaluado el estado general de su bebé.

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