El otoño, el invierno y la primavera son peligrosos, no solo por el frío, sino también por las carreteras heladas. Hable con su hijo sobre los puntos peligrosos con anticipación.
Instrucciones
Paso 1
Para proteger a su hijo del hielo, elija zapatos cómodos con una suela estable y antideslizante, lo mejor de todo sobre una base microporosa. Los zapatos deben ser del tamaño correcto, no deben ser demasiado apretados ni demasiado holgados. La bota debe estar firmemente sujeta a la pierna con un cierre o cordón.
Paso 2
Antes de caminar, no olvide explicar que debe mirar debajo de los pies, tratar de evitar los charcos, tener cuidado en una escalera congelada y usar pasamanos al descender.
Paso 3
Explique que en invierno, cuando las carreteras están heladas, en ningún caso debe apresurarse y correr, especialmente al cruzar la carretera o cerca de la carretera. En una carretera resbaladiza, el automóvil no podrá detenerse rápidamente.
Paso 4
Dígale a su hijo cómo caminar correctamente sobre hielo. Hay situaciones en las que no se puede evitar una superficie resbaladiza. En tales casos, es necesario pisar lentamente toda la superficie de la pierna, si es posible, agarrándose a algún soporte, ya sea una barandilla o una pared contigua, o tomar de la mano a un adulto.
Paso 5
No se puede caminar debajo de árboles cubiertos de hielo en invierno, una rama puede caer de ellos o debajo de edificios con carámbanos. Otro peligro es la posibilidad de que la nieve se derrita del techo.
Paso 6
Si el niño tiene un teléfono, marque su número en una marcación rápida, también díganos que en caso de situaciones imprevistas vale la pena llamar al 101 o 112. Al llamar, debe explicar de manera rápida y clara la situación, decir sus coordenadas o el punto conocido más cercano y diga sus datos, como su apellido, nombre y edad, quédese ahí hasta que lleguen los padres o ayuden. En caso de heladas severas, si es posible, muévase a la tienda o entrada más cercana.