La toxicosis se está convirtiendo en un problema para muchas mujeres embarazadas. Hay dos tipos de esta desviación: temprana (aparece en la etapa inicial del embarazo) y tardía (se desarrolla en la segunda mitad del embarazo). Las causas de la toxicosis pueden ser cambios hormonales en el cuerpo de la futura madre. La predisposición genética también juega un papel importante. Existen varios métodos para deshacerse de esta afección o hacerlo lo más fácil posible.
Instrucciones
Paso 1
Coma con frecuencia, pero en porciones pequeñas tan pronto como sienta hambre. Cuando el estómago está vacío, el ácido del estómago se deja digerir su propio ependimo. Coma hasta que aparezcan las náuseas, la comida debe prevenirlas. Si cierta comida le da asco, no pruebe ni inhale el olor de esa comida.
Paso 2
Beba más, ya que los vómitos dejan una gran cantidad de líquido del cuerpo, mucho más que la comida. Si beber constantemente le resulta problemático, simplemente coma alimentos que contengan mucha agua, como verduras y ensaladas, verduras y frutas frescas.
Paso 3
Tome vitaminas prenatales, preferiblemente antes de acostarse. Un médico puede recomendar vitamina B6, que es útil para tratar las náuseas en muchas mujeres.
Paso 4
Acuéstese temprano para dormir bien por la noche. Un sueño saludable ayudará no solo a aliviar los ataques de toxicosis, sino también a hacer frente a la fatiga que es tan característica de las mujeres embarazadas. Salude a la mañana a un ritmo lento; apresurarse solo aumentará la incomodidad. No salte de la cama de repente. Acuéstese durante unos 15 minutos, coma un par de galletas saladas, solo luego levántese lentamente.
Paso 5
Evite preocupaciones y preocupaciones innecesarias, limítese al mínimo, o mejor, deje de comunicarse con las personas que no le agradan. Rodéate de familiares y amigos cercanos, mira películas divertidas y escucha tu música favorita.
Paso 6
Camine al aire libre con más frecuencia. En verano, da paseos, preferiblemente por la mañana y por la noche, cuando no hace tanto calor, muévete más. La actividad física moderada ayuda a mejorar el bienestar de una mujer embarazada.