La principal ventaja de un teléfono para bebés es el control sobre el bebé. Sin embargo, hay que lidiar con las desventajas que deben minimizarse para que no se produzca ningún daño.
Daño a la salud
Para un niño, un teléfono celular es dañino no solo por la radiación. La vista y el oído son a lo que debe prestar atención cuando un niño está "flotando" incontrolablemente en el teléfono. Una pantalla relativamente pequeña requiere una tensión ocular especial, como resultado de lo cual la visión puede deteriorarse. Los auriculares al vacío y el sonido fuerte pueden causar pérdida de audición en un niño. Una cabeza constantemente baja mientras juega o mira videos en el teléfono contribuye al desarrollo de la osteocondrosis cervical.
Alternativa a la comunicación
Con la llegada de varios programas para un teléfono celular, los niños se han olvidado de cómo comunicarse en vivo. La variedad de juegos, la facilidad para obtener información y la comunicación exclusivamente a través de aplicaciones móviles, genera rápidamente una adicción. El niño come, duerme y camina a todas partes con el teléfono. Ya no es posible simplemente iniciar una conversación con su compañero de clase. Es más fácil escribir un mensaje y enviar un emoticón. A veces, la adicción a los dispositivos se vuelve demasiado obvia e intrusiva. Entonces debe comunicarse de inmediato con un psicólogo.
Para no llamar la atención de especialistas sobre la situación, busque una alternativa. Al niño le encanta escuchar música: compre entradas para el concierto y vaya con toda la familia. Mucha correspondencia por teléfono, déjame llevar a mis amigos a casa. Satisfacer la necesidad del niño, pero en un entorno real y seguro.
Atencion disminuida
Un teléfono celular es una poderosa pérdida de tiempo. Las llamadas, los mensajes a los amigos, los juegos ocupan mucho tiempo. Este tiempo se puede dedicar a hacer lecciones, círculos y pasatiempos. Si el niño deja el teléfono a un lado y toma un libro, y usted necesita su ayuda en este momento, espere. Siempre tendrá tiempo para ayudar.
Peligro de robo
Si compra un teléfono caro para su hijo, existe una alta probabilidad de que le roben al niño. Los ladrones pueden incluso ser compañeros de clase, que quieran tener el mismo dispositivo. En el mejor de los casos, si el teléfono simplemente se saca de la mochila. Pero se pueden quitar por la fuerza, lo que conllevará un trauma psicológico.
Al comprar un teléfono para un niño a una edad temprana, no se olvide de las medidas de seguridad. Después de todo, el daño a la salud que puede infligir a un niño supera con creces cualquier beneficio. Otro aspecto importante es que el niño encontrará en Internet toda la información que le gustaría ocultarle. Si este matiz es relevante para ti, compra el teléfono del modelo más simple sin posibilidad de acceder a la World Wide Web. Además, ponga una cantidad estrictamente fija en su cuenta de teléfono. Así el niño sabrá que el teléfono no es un juguete, sino un medio de comunicación.