El punto G (ji) es el punto más legendario y controvertido del cuerpo femenino. Su presencia y ubicación es controvertida incluso entre los médicos. Alguien no cree en su existencia. Y quienes lo encuentran lo consideran una garantía al 100% de un orgasmo femenino.
Historia de descubrimiento
Por primera vez, el punto ji se describió en las prácticas sexuales taoístas llamadas el "corazón de una flor". Pero el pionero oficial de la ciencia occidental fue el ginecólogo alemán Grafenberg. En su trabajo de 1944, describe un área específica en la pared vaginal, cuando se estimula, una mujer experimenta los orgasmos más fuertes. Pero, debido a las costumbres públicas y al carácter cerrado del tema del sexo, no fue hasta principios de los 80 que los ginecólogos estadounidenses publicaron su existencia en un manual sobre sexo. Desde entonces, tanto hombres como mujeres han asistido a la búsqueda de este punto.
Ubicación del punto G
El punto J está ubicado en la pared anterior de la vagina, aproximadamente en su parte central a una profundidad de 5-6 cm desde el vestíbulo de la vagina, detrás del hueso púbico y la uretra. Su tamaño es de solo unos 16 mm. La sensibilidad de este punto varía mucho de una mujer a otra. Para muchos, tiene baja sensibilidad y su estimulación no conduce al orgasmo.
Antes de iniciar la búsqueda del punto ji, una mujer necesita alcanzar un estado de excitación, ya que es casi imposible encontrarlo en una mujer no excitada.
Cada mujer puede encontrar el punto G por su cuenta o junto con su pareja. Para ello, el dedo de la mano o del pie de la pareja debe entrar gradualmente en la vagina hacia el abdomen. Naturalmente, primero se debe lubricar el dedo con lubricante o lubricante femenino natural. A una profundidad de 5-6 cm, el dedo debe encontrar un área con piel bastante densa, similar a un guisante: este es el punto ji. Al comienzo de la estimulación de este punto, la mujer debe tener ganas de orinar. Pero un masaje más prolongado conducirá a un orgasmo más fuerte. Dado que la sensibilidad de este punto es individual, la espera hasta el orgasmo puede ser bastante larga. Con estimulación prolongada, el tamaño del punto aumenta a 25 cm y se siente como una gran sacudida.
Si la sensibilidad es baja y no hay sensación de orgasmo durante mucho tiempo, intente preestimular el clítoris. O comience a estimular el punto G inmediatamente después del orgasmo. Masajee el punto con movimientos circulares o de traslación con los dedos. Puedes utilizar un vibrador o juguetes especiales de un sex shop para este propósito, que estimulan simultáneamente el clítoris y el punto ji. Pruebe diferentes opciones según cómo se sienta la mujer. Algunas mujeres necesitan una estimulación suave y delicada, mientras que otras requieren una estimulación intensa con una presión bastante sensible. Tenga cuidado, demasiada presión sobre el punto G puede provocar una micción espontánea.
Los hombres también tienen su propio punto G: la próstata, la glándula prostática junto a la uretra. Se encuentra a una profundidad de 4-5 cm desde la entrada al ano.
Además, el punto ji se puede masajear directamente durante el sexo. Para esto, la pose de "mujer encima" o la pose clásica con piernas sobre los hombros de un hombre es muy adecuada. Es en estas posiciones donde una mujer puede regular de forma independiente el ángulo de entrada del pene en la vagina.