¿Qué Crisis De Edad Tienen Los Niños?

Tabla de contenido:

¿Qué Crisis De Edad Tienen Los Niños?
¿Qué Crisis De Edad Tienen Los Niños?
Anonim

Desde el momento del nacimiento hasta el final de la pubertad, el niño atraviesa ciertas crisis de edad. Están asociados no solo con cambios fisiológicos, sino también con choques emocionales a veces negativos. La capacidad de los padres para determinar las tácticas correctas de comportamiento le permitirá atravesar etapas difíciles con la menor pérdida.

¿Qué crisis de edad tienen los niños?
¿Qué crisis de edad tienen los niños?

Durante el período de crecimiento y desarrollo de un niño, su psique y comportamiento están constantemente sometidos a cambios relacionados con la edad. Durante las etapas de transición, el cuerpo del niño pasa sin problemas de una etapa de su desarrollo a otra, sin embargo, las crisis relacionadas con la edad no deben confundirse con saltos en el desarrollo del niño.

Crisis del recién nacido

Se manifiesta en el primer mes y medio o dos meses de vida de un bebé. Desde un punto de vista fisiológico, el bebé solo se adapta al mundo que lo rodea: gradualmente aprende a destetarse de su vida intrauterina. Psicológicamente, este es un período bastante turbulento, cuando el bebé llora a menudo y depende emocionalmente de los adultos cercanos. Después de unos dos meses, el bebé tiene tiempo de sentirse cómodo con la situación, se vuelve más tranquilo e incluso algo acogedor.

Crisis de la primera infancia

De uno a un año y medio, el niño entra en el segundo período de crisis, cuando aprende a caminar y hablar. Dependiendo de la rutina diaria y de sus propias necesidades, el bebé desarrolla gradualmente sus hábitos y biorritmos para un cómodo desarrollo. Durante este período, está especialmente apegado a su madre, sin embargo, se da cuenta de que ella no le pertenece solo a él. El niño incluso es capaz de mostrar sus primeras "acciones de protesta", pero los padres amorosos deben corregir su comportamiento de manera suave y persistente.

Crisis 3 años

Los psicólogos infantiles caracterizan esta etapa como la más aguda y difícil, cuando la terquedad y obstinación del niño puede llegar a su clímax. Los niños no solo muestran voluntad propia, sino que a menudo incluso van en contra de las reglas establecidas previamente. Sin embargo, esto es solo una prueba de sus padres para determinar la fuerza y la fuerza de carácter, hasta dónde puede llegar en su desobediencia. No debe reaccionar de manera agresiva ante tales arrebatos emocionales; es suficiente simplemente dirigir la atención del niño a algún detalle interesante.

Crisis de la edad de la escuela primaria

La ola de crisis de un niño de 6 a 8 años está directamente relacionada con un cambio en su estatus social: un exjugador de jardín de infancia se convierte en un escolar. Para reducir el posible exceso de trabajo y la ansiedad, los padres deben hacer que la vida del niño sea lo más cómoda posible, rodeándolo de atención y cuidado. Si el estudiante recién nombrado no está interesado en clases adicionales y visitas a varios tipos de círculos y secciones, los psicólogos no aconsejan ir en contra de los deseos del niño. La sobrecarga suele afectar negativamente el desarrollo fisiológico y psicológico de los niños.

Crisis adolescente

La edad de transición para la mayoría de los padres no suele pasar desapercibida. A los 12-15 años, el niño amado deja de ser un niño, aunque tampoco puedes llamarlo adulto. La intemperancia a veces incluso puede convertirse en agresión, y la justicia propia hace que un adolescente sea bastante terco y obstinado. Es muy importante para él afirmarse entre sus compañeros, mientras que las formas de lograr el objetivo a menudo conducen a un comportamiento asocial. Es importante que los adultos establezcan un contacto de confianza con su hijo, para que puedan atravesar juntos el turbulento período de la adolescencia sin muchas preocupaciones.

Todos los niños suelen pasar por crisis periódicas relacionadas con la edad, pero sus manifestaciones dependen directamente de las características individuales del niño. Una buena relación con tus padres puede suavizar las asperezas y hacer que un período turbulento sea lo más cómodo posible.

Recomendado: