Criar hijos es un trabajo muy duro y minucioso. Los padres crían a sus hijos durante toda su vida, con la esperanza de que su hijo crezca y se convierta en una persona honesta, amable y digna.
En el mundo moderno no es tan fácil educar a una persona digna. Esto se debe a que reinan la crueldad, la indiferencia, la abundancia de tentaciones. Criar hijos es un tema aparte. Cómo criar a un niño para que sea una persona amable y honesta, pero al mismo tiempo para que no se convierta en objeto de burla para los demás, es un gran problema. Sin embargo, no solo es posible solucionarlo, sino que también es necesario.
Es muy importante enseñarle a su hijo a ser siempre honesto. No lo engañes, no debe haber lugar para las mentiras en la familia. Acepta cualquier verdad. No critiques, no te enojes, trata de entender por qué hizo esto. De lo contrario, esto conducirá al hecho de que el niño se retraiga. Tendrá miedo de decirte algo, esperando críticas o gritos en respuesta. Le resultará más fácil contarte mentiras "dulces" para evitar un escándalo u otra reprimenda.
Asegúrese de desarrollar su punto de vista en él. Siempre consulte con él, pida su opinión en diferentes situaciones, esté de acuerdo y, a veces, incluso desafíe que aprendería a defender su posición. Esto le enseñará a tener la cabeza sobre los hombros, a no ser manipulado por otros.
Dele a su hijo un sentido de responsabilidad por las consecuencias de sus acciones. Aprenderá a asumir la responsabilidad de sus acciones y sus consecuencias. Esto le enseñará a pensar antes de hacer algo.
Alabe a su hijo, trate de apoyarlo siempre. Alabanza: aumenta el sentido de autoestima, desarrolla una alta autoestima y esto es una gran ayuda en la vida. Sin embargo, no debe exagerar aquí, porque el elogio excesivo es absoluto en todo puede llevar al orgullo y la arrogancia, así como a una actitud negativa hacia la crítica.
Enséñele a su hijo a respetar a los mayores, a no ofender a los más jóvenes y a ser justo en cualquier situación.
Un criterio de crianza tan simple puede ayudar a un niño a crecer como líder, un hombre amable, honesto y responsable. Siempre seguirá siendo él mismo, sin perder su personalidad.
Con todo esto, hay que recordar que son los padres los que son modelos a seguir para los niños.