Los condones son un método anticonceptivo de barrera popular. Su asequibilidad, facilidad de uso y una amplia gama de productos hacen de estos productos el líder en el campo de la anticoncepción.
Cómo elegir un condón
Los fabricantes de condones ofrecen una gran selección de estos productos. Como regla general, el condón más común tiene las palabras "Estándar" o "Clásico" en el empaque. Algunas empresas producen productos de gran tamaño con la marca XXL. El surtido también incluye condones con paredes especialmente delgadas o formas anatómicas, para realzar las sensaciones naturales. Para mayor protección, se utilizan condones lubricados con espermicida para prevenir el embarazo incluso si el producto se rompe. Para el sexo anal se utilizan condones extra fuertes con abundante lubricación. También hay productos con espinillas, costillas y rayas en relieve para una estimulación adicional. Los condones de colores y sabor aportan sensaciones extra. Y algunos productos incluso brillan en la oscuridad.
Los primeros condones se usaron antes de nuestra era. El condón del faraón Ramsés I se conserva en el Museo de El Cairo.
Cómo usar un condón
El producto debe aplicarse antes de las relaciones sexuales, ya que incluso antes de la eyaculación, se puede liberar una cierta cantidad de esperma del pene. Primero, se aprieta la punta del condón, el sucesor del esperma, con dos dedos para expulsar el aire. El condón enrollado se coloca en la cabeza del pene erecto y se despliega hacia la base. El condón debe permanecer en el pene durante toda la relación sexual. Apenas se siente un buen producto. Después de la eyaculación, se retira suavemente el pene, sosteniendo el condón en la base.
Aunque los condones son muy duraderos, pueden romperse fácilmente con una joya afilada o con una uña larga.
Nota
No use condones con lubricantes a base de grasas. Cualquier grasa destruye el látex del que están hechos la mayoría de los condones. Además, no puede ponerse dos condones a la vez con el propósito de una mayor protección; esto causará fricción entre los dos productos, lo que provocará el efecto contrario. Durante una relación sexual prolongada, es posible que se necesiten varios condones; si el producto ha perdido completamente su lubricación o comenzó a frotar, debe reemplazarse. Algunas personas pueden ser alérgicas al látex. Se manifiesta en enrojecimiento de los genitales, picazón y ardor, a veces aparece dermatitis o urticaria. En este caso, debe encontrar métodos alternativos de protección.