Muchas escrituras dan testimonio de la existencia de diversos signos en Rusia. En casi todas las áreas de la vida humana, las supersticiones todavía están presentes en la sociedad moderna. Hablando de un evento solemne, incluso las personas no muy supersticiosas están interesadas en las tradiciones y costumbres asociadas con él. Tales eventos incluyen la boda y su fecha bien elegida.
Sin duda, cualquier época del año tiene sus propios méritos, y cada uno puede elegir a su gusto. Sin embargo, durante mucho tiempo la Iglesia Ortodoxa ha proclamado una serie de restricciones religiosas asociadas con la elección de la fecha del matrimonio:
a) no se recomienda celebrar la boda en días como martes, jueves y sábado en cualquier época del año;
b) no es recomendable jugar una boda durante ayunos de varios días;
c) es necesario abstenerse de bodas durante las grandes fiestas de la iglesia.
En cuanto a la elección de un mes exitoso para la boda, debe consultar el "calendario de bodas" de nuestros antepasados.
Enero no es un mes próspero, hasta la viudez temprana.
Febrero es un buen mes, una señal de acuerdo entre marido y mujer.
Marzo: promete la residencia de la novia en el lado equivocado.
Abril: prepara la felicidad inconstante en la vida familiar, como el clima de este mes.
Mayo no es un buen mes para casarse, para traicionar tu propia casa.
Junio es un buen momento para casarse y promete una luna de miel para los recién casados por el resto de sus vidas.
Julio traerá momentos felices y tristes a la vida familiar.
Agosto es un mes maravilloso para la celebración, el esposo será un maravilloso amigo y amante durante toda su vida.
Septiembre: profetiza una unión fuerte, tranquila y tranquila de por vida.
Octubre no es un buen mes, promete una vida difícil y difícil para los recién casados.
Noviembre es un mes que prepara una vida rica y próspera para los cónyuges.
Diciembre es un mes perfecto, el amor será cada año más fuerte.
Como dicen, los matrimonios se hacen en el cielo, y aunque la fecha de la boda no es garantía al cien por cien de una vida feliz para los cónyuges, elegir el momento adecuado para el matrimonio aumenta las posibilidades de un matrimonio exitoso, al menos nuestros antepasados creían en esto.