Durante el embarazo, el cuerpo de una mujer se ajusta no solo a sus necesidades, sino también a las necesidades del niño. Para evitar el rechazo del feto, se reduce la inmunidad de la mujer. Esto se explica por el hecho de que el niño es un organismo extraño que contiene material genético no solo para la madre, sino también para el padre. La característica negativa de esta reacción defensiva es que la mujer es más susceptible a la enfermedad. A menudo, la garganta se convierte en el primer objetivo del ataque de virus y bacterias. Y el tratamiento tradicional durante el embarazo está contraindicado.
Instrucciones
Paso 1
Haga gárgaras con infusiones de hierbas. La manzanilla, la hierba de San Juan, la salvia, la caléndula y el eucalipto tienen propiedades antiinflamatorias. Prepare una cucharada de cualquiera de las hierbas enumeradas en un vaso de agua hirviendo, cuele el caldo presente. El agua tibia, diluida a la mitad con jugo de remolacha o cebolla, es buena para el dolor de garganta. El enjuague tradicional con solución de bicarbonato de sodio será más efectivo si agrega unas gotas de yodo y un poco de sal al vaso. Haz gárgaras con infusiones de hierbas cada dos horas, pero es mejor no abusar de la última receta, ya que la sal y la soda resecan la mucosa bucal.
Paso 2
Mastica y chupa un trozo de propóleo. Puede causar molestias en la boca, pero todas las molestias se compensan con un excelente efecto curativo que le permite hacer frente incluso al dolor de garganta bacteriano en la etapa inicial.
Paso 3
Tomar 3 veces al día por una cucharadita de jugo de cebolla o ajo. Incluso el dolor de garganta más severo con dicho tratamiento desaparecerá en unos pocos días.
Paso 4
Hacer una compresa por la noche con una gasa húmeda y jabón para lavar. Colóquelo en su cuello y cúbralo con un paño seco encima. Por la mañana, lávese el cuello y lubríquelo con crema hidratante.
Paso 5
Inhala con una variedad de hierbas. Respirar el vapor del caldo hirviendo ayuda a aliviar el dolor de garganta. La inhalación sobre leche caliente o papas hervidas ayudará a hacer frente no solo a la angina de pecho. Con laringitis, aliviarán rápidamente la ronquera o devolverán la voz perdida.