Muchos padres a menudo tienen que prohibirle algo a sus hijos. Sin embargo, no todo el mundo sabe que existen dos tipos de prohibiciones: prohibiciones que son útiles para el niño y prohibiciones que destruyen la personalidad del bebé.
TOP 3 de las prohibiciones parentales más destructivas.
Lo que no se puede prohibir:
1. Prohibir vestirse usted mismo. Muchos padres no permiten que sus hijos se vistan de forma independiente con la ropa que han elegido. La mayoría de los niños se resisten a este tipo de "cariño". Cuando los padres forman un guardarropa para un niño todos los días, lo hacen dependiente de las opiniones de otras personas. En consecuencia, el bebé crece dependiente.
2. Prohibir tener una opinión. A los padres les conviene que sus opiniones coincidan con las de los niños. La inconsistencia de opiniones a menudo conduce a malentendidos, conflictos y discordia. Sin embargo, el niño debe tener su propia opinión, gracias a esto desarrollará el pensamiento crítico. Los mayores descubrimientos del mundo los hacen personas que alguna vez no creyeron en la opinión de los demás. Tener tu propia opinión significa mirar el mundo con seriedad. Trate de pedir la opinión de su hijo con más frecuencia.
3. Prohibición del derecho a ser uno mismo. Los padres suelen comentar sobre su niño pequeño si es lento, ruidoso o hablador. Prohibiciones de este tipo tienen un efecto destructivo sobre la manifestación desde el mejor lado de la propiedad que está programada en una persona determinada. Después de todo, el mundo no necesita las mismas personas. Si cultivas las propiedades con las que nace una persona, seguramente logrará grandes resultados en la vida posterior.
Debes aceptar esas inclinaciones con las que nació tu hijo y tenerlas en cuenta en el proceso de crianza.