La naturaleza se aseguró de que pocas horas después del nacimiento de un niño, una mujer pudiera comenzar a alimentarlo con leche materna. Este es el alimento más útil y necesario para un bebé. Sin embargo, a veces surgen situaciones en las que la lactancia materna no es posible.
Influencia de las primeras horas de vida de un bebé en la forma de alimentación
Las primeras pruebas sobre el proceso natural de alimentación del bebé pueden ocurrir incluso en el hospital. Por lo tanto, no todos los partos transcurren sin problemas, y el trauma severo del parto puede requerir la separación de la madre y el niño, el traslado del bebé a la unidad de cuidados intensivos o simplemente al departamento de niños, donde estará bajo la supervisión constante de médicos.
A pesar de todo, la leche comienza a aparecer en grandes cantidades en las glándulas mamarias de una mujer dentro de las 5-6 horas posteriores al parto. Por lo tanto, si la madre no puede comenzar a alimentar al bebé de inmediato, debe extraer calostro para no provocar la aparición de mastitis. El niño en este momento come mezclas. Por tanto, surge una pregunta interesante: ¿entonces el bebé tomará el pecho?
Razones que pueden interferir con la lactancia
Cuando el bebé y la madre se reencuentran después de la dificultad de los primeros días en el hospital, el bebé puede negarse a mamar porque ya está acostumbrado al sabor de las mezclas. Además, cuando se alimenta con biberón, el bebé tiene que hacer menos esfuerzo para llevar la leche a la boca. Por lo tanto, algunos niños categóricamente no amamantan, lloran y se ponen nerviosos.
Otro escenario posible es que una mujer comience a experimentar un dolor insoportable al alimentar a un niño. Aparecen heridas y grietas en los pezones y la alimentación cómoda se vuelve imposible.
En este caso, las madres recurren a alimentar al bebé con leche materna extraída. En cualquier caso, es mucho más útil que utilizar una mezcla, aunque sea la más moderna y adaptada. Sin embargo, este método de alimentación no es una alternativa absoluta a la alimentación natural, aunque es mucho más saludable para el bebé que la alimentación completamente artificial.
La leche extraída congelada ayudará en los casos en que la madre, por alguna razón, esté lejos del bebé y no pueda alimentarlo ella misma.
Aspectos negativos de la alimentación con biberón
La mayor y más significativa desventaja al alimentar con leche extraída es la falta de contacto corporal entre el bebé y la madre. Pero es tan importante para un niño en los primeros meses de vida sentir constantemente a su madre a su lado, su olor, calor, tacto. Por lo tanto, incluso si es necesario alimentarlo, abrace al bebé con la mayor frecuencia posible y llévelo en sus brazos.
La leche materna es necesaria para la formación de una fuerte inmunidad en el bebé.
La leche que se deja almacenada o incluso congelada perderá algunas de sus propiedades beneficiosas. Además, está privado de hormonas que se liberan solo durante la succión natural. Además, el biberón no permite que el bebé controle por completo la velocidad del flujo de leche.
Intente utilizar todos los medios para mantener o reanudar el proceso de lactancia y, solo como último recurso, alimente al bebé con leche extraída.