Los médicos llevan mucho tiempo hablando de los beneficios de las comidas frecuentes: es mejor dividir la dieta diaria en varias partes y comer un poco cada dos o tres horas. Es especialmente importante que las mujeres embarazadas coman fraccionadamente, una gran cantidad de comida a la vez puede provocar pesadez en el estómago y problemas digestivos.
Frecuencia de alimentación durante el embarazo
La dieta es importante para todas las personas, independientemente de su sexo, edad y estado de salud. Los médicos recomiendan dividir la ración diaria no en tres comidas, como es habitual en muchas familias, sino en al menos cinco, y en algunas enfermedades esta cifra aumenta a seis o siete. La nutrición fraccionada es necesaria por varias razones. Primero, el cuerpo no puede asimilar simultáneamente una gran cantidad de nutrientes. Por ejemplo, según los nutricionistas, solo se perciben 30 gramos de proteína por comida, es decir, si una persona come más, no obtendrá ningún beneficio de ella. La tasa metabólica disminuye con las comidas raras.
En segundo lugar, los períodos prolongados entre comidas conducen a una deficiencia de aminoácidos, como resultado de lo cual los músculos comienzan a descomponerse para su producción. Esto es especialmente importante para las personas que realizan un entrenamiento intenso durante el día. Y en tercer lugar, la ingesta de alimentos demasiado densa carga el estómago, y si lo come poco a poco y con frecuencia, hará frente a sus tareas.
Además, se aconseja a todos los nutricionistas que coman de acuerdo con un cierto régimen, por horas, para que el sistema digestivo funcione mejor.
Todas las ventajas enumeradas de las comidas frecuentes son especialmente importantes para las mujeres durante el embarazo. El útero con el feto se expande, ocupando mucho espacio en el abdomen, no hay espacio adicional para el estómago, los intestinos también están bajo estrés, por lo que la digestión en mujeres embarazadas es más frágil. Una gran cantidad de comida ingerida en una comida causa pesadez en el estómago, acidez y dificultad para la digestión. Y todas las recomendaciones anteriores para muchos se convierten en una necesidad.
¿Con qué frecuencia debe comer durante los diferentes períodos del embarazo?
En la primera mitad del embarazo, debe comer al menos cuatro, y preferiblemente cinco veces al día. La dieta debe programarse por horas. Si bien el niño es pequeño, los problemas digestivos son raros, pero de todos modos no vale la pena comer en exceso. Horario ideal: desayuno a las 8-9 horas, almuerzo a las 13 horas, merienda a las 16-15 horas y cena a las 19 horas, es posible más tarde dependiendo de la hora de dormir.
En la segunda mitad del embarazo, debe aumentar la cantidad de comidas por día. Para entonces, muchos órganos han aumentado de tamaño, lo que interfiere con la digestión normal y obliga a reducir el volumen de una comida. Los médicos recomiendan comer 5-6 veces al día, complementar su dieta con un segundo desayuno y un pequeño refrigerio dos horas antes de acostarse.