La observación es una forma de conocimiento sensorial del mundo, gracias a la cual las personas pueden distinguir objetos, sonidos, olores similares, reconocer rostros familiares, etc. En los adultos, el proceso de observación es deliberado, mientras que los niños lo hacen de forma selectiva y espontánea. Para desarrollar la observación en los bebés, debe lidiar con ellos constantemente.
Instrucciones
Paso 1
Intente tener un juego entretenido con su hijo destinado a desarrollar la observación. Elija una caricatura soviética antigua interesante, por ejemplo, "Ramita de nuez", "Erizo en la niebla", "Antílope dorado", "¡Oh, carnaval!" etc. Los directores de esos años daban gran importancia a los detalles y expresividad de los personajes, por lo que cada fotograma está lleno de pequeños detalles, que no siempre se notan a primera vista. Mire la caricatura con su bebé y discútala. Con preguntas orientativas, averigüe cuántos pequeños detalles notó y recordó el niño. Luego, mire la caricatura unas cuantas veces más, quizás cuadro por cuadro, y dirija la atención del bebé a los elementos sobre los que le preguntó, así como a la música, los gestos, las expresiones faciales, los sonidos y mucho más.
Paso 2
Piense en otros juegos para desarrollar la observación o utilice los ejercicios que aconsejan los psicólogos. Por ejemplo, antes de salir al jardín de infancia, piense en un objeto que marcará en el camino. Pueden ser coches de cualquier color, animales, árboles de cierto tipo. Trate de buscar nuevos elementos en el camino, que no estaban allí el día anterior o no los notó. Una gran oportunidad para mejorar su observación es estar atento a los cambios de estación. Celebre con el niño los cambios que se producen en la naturaleza con la salida y llegada de las estaciones, llame su atención sobre señales y fenómenos diversos.
Paso 3
K. Paustovsky habló notablemente sobre el desarrollo de la observación, quien, por cierto, era muy aficionado a observar varios fenómenos naturales. Aconsejó mantener la visión "en línea", en un tono constante: "Trate de mirar todo durante un mes o dos con el pensamiento de que definitivamente debe pintarlo con pinturas". En el tranvía, en el autobús, en todas partes miras a la gente de esta manera. Y después de dos o tres días, estará convencido de que antes no veía en las caras y una centésima parte de lo que notó ahora. Y en dos meses aprenderá a ver y ya no tendrá que esforzarse para hacerlo ". Al entrenar la atención del niño, le da la oportunidad de ver muchas cosas interesantes, enseñarle a comparar, notar y sacar conclusiones. Y como resultado, su vida se volverá más colorida, voluminosa, más plena.