Puede resultar difícil dar un gran paso. En esos momentos, puede que se sienta abrumado por las dudas. Incluso una persona que no esté inclinada a ellos puede confundirse cuando hay demasiado en juego.
Asumir la responsabilidad
Para decidir un paso importante, debe reunir valor y asumir la responsabilidad de sus propias acciones. Quizás no confías lo suficiente en ti mismo. Piense por qué. Si hubo errores en su pasado, vale la pena aprender de ellos, haciendo una experiencia útil. Hasta que no hagas este trabajo, tendrás miedo de actuar.
Resista la tentación de transferir parte de la responsabilidad de la decisión a otra persona; no consulte con familiares y amigos. Si las consecuencias del paso que has dado te afectan solo a ti, debes pensar qué hacer. Tú sabes mejor lo que necesitas. Los consejos de los demás pueden resultar erróneos y desviarlo. Las excepciones son el asesoramiento de expertos en un área específica. Por supuesto, vale la pena recurrir a sus servicios en algunas situaciones.
Examinar el escenario
Piense en cómo se pueden desarrollar los eventos con una u otra de sus decisiones. Esto le ayudará a evaluar objetivamente la situación actual e identificar todos los riesgos. Debe estudiar cuidadosamente todos los hechos, considerarlos desde todos los lados. También trate de determinar qué sucederá si no toma ninguna medida. Si las consecuencias son peores que cualquier resultado posible, debe actuar lo más rápido posible.
Si su vida después de una decisión importante cambia para mejor y simplemente tiene miedo de los cambios, encuentre tantas ventajas como sea posible en su puesto futuro. Recuerde que el cambio es inevitable en la vida. La ventaja de cambiar las circunstancias es que te permiten desarrollarte como persona. Y si no está mejorando, entonces está retrocediendo. Por lo tanto, no debes tener miedo a lo nuevo.
Quema los puentes
Si comprende claramente que necesita dar un paso importante, pero no puede decidirlo, corte sus rutas de escape. Hágalo para que ya no pueda abandonar su plan. Digamos que no puede encontrar la fuerza para cambiar de trabajo. Encuentra un nuevo trabajo y firma un contrato de trabajo. Entonces no tendrá más remedio que contarle todo a la gerencia y firmar una carta de renuncia. Después de todo, ya ha prometido trabajar en otra empresa y le estará esperando una fecha concreta. Además, puede compartir sus planes con amigos y seres queridos si esto lo motiva a tomar medidas inmediatas.